El hambre con las ganas de comer

Félix Fernández
en CANCHA


Se juntaron el hambre con las ganas de comer, se sacó la lotería sin comprar boleto y Alan Pulido llegó al futbol mexicano como la contratación más cara en la historia del Chivas y, por si fuera poco, del futbol mexicano.

En los últimos 28 meses este goleador nacido en Ciudad Victoria inició 11 partidos, jugó en 23 y anotó 7 goles en dos equipos griegos. No son ni con mucho los mejores

números para ser una contratación estelar en la Liga mexicana pero...

Beneficiado por la falta de producción de talentos en la línea ofensiva dentro de las Chivas, por el desprendimiento de sus escasos goleadores, el impedimento de contratar extranjeros para este Club que cumple 110 años y, sobre todo, afortunado por la flamante Regla 10/8 que inhibe la atención hacia los centros delanteros mexicanos, Pulido regresa con los mismos lentes oscuros que se marchó (sin autorización de su Club), una chamarrita similar y el mismo aire de: "a mí ni me pregunten, yo no sé nada".

A primera vista Alan Pulido salió ganando después de su fallida gira artística por Europa, en la que su nombre apareció más en otras notas que nada tienen que ver con su profesión, pero la realidad es otra: en el futbol de hoy en día quien se detiene no se estanca, retrocede invariablemente. A pesar de su juventud, este goleador ha dejado pasar demasiado tiempo como para pensar que veremos de inmediato al mismo futbolista del Clausura 2014, aquel que con sus goles y condiciones le valió ser considerado dentro de los 22 mundialistas en Brasil.

Aunque, eso sí, las posibilidades de que Alan regrese pronto a la Selección Nacional son muchas, no por su gran nivel, sino, de nuevo, por la falta de goleadores: sin ir más lejos, en esta convocatoria para los dos compromisos de eliminatoria, los tres atacantes de élite mexicanos, están en este momento lesionados, por lo que es necesario echar mano de futbolistas que se encuentran en un proceso de maduración muy arriesgado.

La dificultad para destacar como mexicano, en la posición de centro delantero en su propio país, no es nueva. Basta recordar que Raúl Jiménez tuvo la oportunidad de darse a conocer y convencer en América, gracias a la contratación de un tremendo petardo llamado Narciso Mina, que le obligó a Miguel Herrera a voltear hacia sus atacantes juveniles, donde se encontraba el hoy jugador del Benfica.

Si hacemos un repaso por los 18 equipos de la Liga MX, nos damos cuenta que, fuera de Chivas, muy pocos directores técnicos dan la oportunidad hoy en día a mexicanos: Lalo Herrera ya no es titular en Pumas, Jaguares empezó el torneo con Zúñiga y "Chuletita" Orozco, al paso de las jornadas ya no juegan. En Atlas Martín Barragán sí es considerado por el "Profe" Cruz... Oribe Peralta con su ya comprobadísima calidad a prueba de cualquier extranjero es muy solido en América, en Toluca el juvenil Alexis Vega se ha ganado un lugar dentro del 11 titular de Cristante y de última hora Cruz Azul ha contratado al "Cubo" Torres, quien desde marzo del 2015 no ha convertido un solo gol. Más allá de estos pocos, nada, sólo jugadores inmaduros u otros que no maduraron.

La única posición medible en el futbol es, justamente la de centro delantero: goles anotados vs tiempo dentro del campo. Por donde se vea, Pulido ha costado una fortuna de acuerdo a sus números en los últimos dos años. Se ha juntado el hambre de Chivas con las ganas de comer de Alan. A todo el futbol mexicano le conviene que este goleador tome consciencia del gran premio de lotería que se ganó sin merecerlo y que, a la brevedad, demuestre por qué ha invertido tanto su nuevo equipo en él.

 
 
ffernandez@reforma.com
Twitter: @felixatlante12