CALIFICACIÓN 8.0
Al conducir el Santos vs. Pachuca, el silbante Roberto García pone en práctica aquello de ser primero conductor y luego autoridad.
Convence con sus señalamientos, que son adecuados, y sobre todo destaca en el uso de las tarjetas.
Pero es mejor la aplicación de la regla 7, al añadir en el segundo tiempo lo que se perdió.
El arroz negro en su
trabajo fue el no amonestar a Hirving Lozano que comete cuatro faltas de las 13 de los Tuzos.