Coaching atlista
Ya les platicaba que a los jugadores del Atlas les afectó en el ánimo la "Noche Triste" en Puebla, mientras que a la directiva rojinegra le preocupa la falta de puntos y tomó cartas en el asunto.
Por ahora no han pensado en castigar económicamente a los pateabalones, como sucedió el torneo pasado, sino que más bien están invirtiendo en temas
mentales.
No vayan a creer que el Atlas va a mandar a sus jugadores a Colombia a tomar clases de desarrollo humano, como lo hizo Jorge Vergara, con las Chivas, en 2010. Lo que harán es apoyarse en el coaching, tan de moda en estos tiempos.
Traducido para los mortales, este asunto no es otra cosa que una disciplina que ayuda a trazar metas, discutir la manera de alcanzarlas y llevarlas a cabo paso a paso, con tranquilidad, y así despejar el panorama. Bueno, eso me explicaron.
Esto lo ha hecho la directiva para tratar de que el equipo gane en casa y ya no tenga que gastar en brujas, misas, bendiciones o cualquier otra cosa para darle el ansiado triunfo a La Fiel.
Digamos que los directivos no están enojados con Gustavo "Cepillín" Costas, porque ya suma cuatro duelos sin ganar, sino preocupados por los jugadores, pues ven a algunos en las nubes y quieren recuperarlos.
Hubo varios chavos a quienes les subieron el sueldo para ver si despertaban y pasó lo contrario, pues ahora juegan más adormilados, pierden la marca dentro del área chica o no toman la batuta del equipo como debe de ser.
Todo sea por ganar.
Valiente
Bien dicen que los futbolistas deben ser ejemplo dentro y fuera de la cancha, pero eso parece que aún no lo comprende un defensa de las Chivas.
No puedo decirles el nombre, pero su papá se llama Carlos Salcedo. El chiste es que estaba suspendido el sábado para el partido de las Chivas contra el Toluca, pero acudió al Estadio Omnilife para verlo en la tribuna y echarle porras a sus compañeros.
Ya les había platicado que su forma de ser no le cae bien a algunos en el plantel, porque se cree la última cerveza del Omnilife, pero de eso a responder a agresiones de la gente ya pasa a otro nivel.
Tras acabar el duelo, acompañado de una dama, bajaba las escaleras que dan al estacionamiento y un chiva hermano lo reconoció y, de lejos, le recordó a su progenitora.
Pues como que nunca nadie le dijo que a los locos o agresivos no hay que hacerles caso, pues se envalentonó y le respondió al aficionado.
El asunto no pasó de ahí, afortunadamente, pero ojalá alguien ubique a este muchacho porque puede llegar el día en que se salga de control un conflicto como ése.
Las dos caras
Mientras cada vez suenan y suenan nombres para ocupar la portería del América en sustitución de Moisés Muñoz, el portero azulcrema ya empieza a voltear afuera de Coapa.
Es de los hombres más disciplinados del club, de los que menos problemas dan y, aunque sabe que su contrato termina en diciembre, Muñoz ni siquiera ha ido a tocar la puerta de la directiva para renovar su contrato.
Prefiere trabajar y cuidarse al máximo porque sabe que esa va a ser la única manera de alejar los nubarrones o conseguir otro equipo. En el tema de la alimentación también se ha aplicado, pues luego de haber acudido al nutriólogo por recomendación del entonces técnico de la Selección, Miguel Herrera, su físico mejoró.
Es decir, ya no le pega con singular alegría a las tortas y todo lo que contenga vitamina T. Bueno, al menos eso afirma.
El que sí anda más nervioso es el segundo arquero, Hugo González, porque siempre pensó que iba a ser el relevo natural de Moi y rechazó la oferta de Carlos Reinoso para irse al Veracruz, en donde habría sido titular.
Ahora anda preocupado por su futuro, porque con las Águilas no juega y no sabe si el "Maetro" seguirá para la siguiente temporada con los Tiburones como para volver a ofrecerle chamba.
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