El duelo
A Miguel Herrera le siguen llegando ofertas, quizá no tan formales con cantidades en mano y papeles listos para firmar, pero de que tiene opciones, las tiene.
Sólo que por ahí me contaron que ciertos directivos, que no comulgaron con su despido de la Selección Nacional, quedaron en muy buenos términos y le comentaron que si llegaba a decidirse por algún conjunto del
futbol nacional, antes que nada se tomara su tiempo y sobre todo que pensara que hay algunos que llevan mano, tomando en cuenta la relación que los llegó a ligar en el pasado.
El "Piojo" poco a poco va superando el trago amargo que pasó luego de su despido; ya sabe con qué amigos cuenta y los enumera con los dedos de la mano porque más de uno le volteó la espalda feo. Sin embargo, está decidido a dejar que la herida cicatrice antes de sentarse a platicar con alguien en particular, pues el duelo que ha vivido resultó demasiado doloroso.
Me dicen sus amigos que ni ganas de ver los partidos del Tri tiene porque se le juntan las emociones y que así como superó lo ocurrido en 1993 cuando quedó fuera del Mundial de Estados Unidos, ahora confía en que el tiempo cure todos los males, porque también está seguro que en unos años podría venir su revancha deportiva.
Los consentidos
Aprovechando las minivacaciones del receso FIFA, los que se aventaron un tour para buscar casa y dejar el hotel en el que viven son los argentinos que dirigen a Chivas, encabezados por Matías Almeyda, Martín para los cuates.
Aún con el chofer proporcionado por Omnilife, quien los ha traído en el último mes de un lado para otro, el pastor argentino y sus ayudantes conocieron las colonias más "in" de Zapopan, incluidas las cercanas al centro comercial Andares.
Vieron desde departamentos hasta mansiones, pero al final los 6 que integran el grupo de argentinos, encontraron la mejor opción en la tradicional colonia Puerta de Hierro, donde varios jugadores, ex jugadores o técnicos, como Ricardo La Volpe, tienen su hogar de residencia.
Las rentas ahí no son baratas, pero Martín y sus amigos se dieron gusto para escoger la mejor opción, sobre todo encantados por la cercanía con el centro comercial, además de estar a unos minutos en auto del estadio, de Verde Valle y las oficinas del Jefe.
Cada uno encontró su casa, la mayoría con rentas desde los 30 o 35 mil pesos al mes, mientras que Almeyda se dejó querer con una residencia que cobra 93 mil de renta, pero que cuenta con alberca y gimnasio propio.
Ya lo que no me supieron decir, es si hicieron contrato con el arrendador por seis meses o por el año completo.
san.cadilla@reforma.com