En los últimos torneos hay dos cosas constantes en las Chivas: los cambios de toda índole y los malos resultados.
La incertidumbre ha acompañado al equipo en un lapso tan prolongado que, pese a su buen torneo anterior, sigue y seguirá en problemas de descenso un buen rato. Era un dato conocido.
Esta mañana, según lo declarado por Matías Almeyda, sostendrá una segunda plática con el
presidente, ni más ni menos el hermano del entrenador. Ambos de la Torre fueron convencidos para salvar la nave rojiblanca, amenazada en los ámbitos deportivos, estructurales y filosóficos con tal frecuencia que parecería estar planeada por sus más sádicos enemigos.
Un nuevo embate se presenta en el equipo rojiblanco: a falta de resultados, las ideas rondan por la cabeza y lo que era una especulación hasta la tarde del domingo se convirtió en una noticia por confirmar.
Una de las principales encomiendas que Néstor de la Torre tenía al regresar al Guadalajara, era convencer a Chepo de hacer lo mismo. En diferentes entrevistas ambos reconocieron que no fue fácil lograrlo. El entrenador tenía razones para desconfiar y requería de un contrato que lo protegiera.
Cinco derrotas en ocho partidos no hablan bien de nada, pero haber llegado a Semifinales del torneo anterior sí que lo hace. Convertido en hospital, el Guadalajara no ha podido repetir alineación en el torneo. Es un imponderable que, según lo visto, estaría acabando con un proyecto más en las arenas movedizas rojiblancas.
La pregunta que se estará haciendo por enésima vez Jorge Vergara consistirá en saber si un cambio de entrenador modificará la dirección que ha tomado el equipo. De ser así, si contemplar a alguien que no tiene de México ni siquiera la experiencia como futbolista, es lo más congruente.
Sabiendo que el trato entre Chepo y Néstor en el ámbito profesional debe ignorar lazos de sangre, hay un cuestionamiento crucial: ¿Dejó Néstor, presidente de las Chivas, de creer en el proyecto de Chepo? ¿Estará de acuerdo en que un técnico nuevo e inexperto tome en su lugar las riendas? ¿Será ésta la última decisión antes de hacer también su equipaje?
Faltan tres cuartas partes de calendario para determinar el descenso, pero el Guadalajara prepara en su laboratorio otra decisión extrema.
No sería la primera vez. En las anteriores no se obtuvo remedio, pero si un aprendizaje, a menos que se vuelva a demostrar lo contrario.
fjglez@mural.com
Twitter: @fj_tdn