Transacciones a la turca'
Las malas prácticas de pasar un dinerito por debajo de la mesa para que no se registre su existencia no son exclusivas de nuestro querido México.
Dicen, insisto diiicen, que un acuerdo en lo oscurito es lo que tiene detenido el pase internacional del argentino Fernando Belluschi, quien llegó para esta temporada al Cruz Azul desde el
Bursaspor, pero no ha podido debutar.
El pase del volante habría sido fijado en 5 millones de dólares, mismos que La Máquina ya habría pagado, peeero había una cantidad extra de 2 millones que los turcos no han recibido y por la que están retrasando los trámites.
En Cruz Azul creen que tienen la sartén por el mango porque han cubierto todo lo que, en el papel, debe cubrirse, pero los turcos retrasan el trámite para sacar tajada. El caso es que si van a FIFA, como proponen los celestes, seguramente ganarán, pero el retraso en el debut del argentino, ese golpe ya está dado.
Ahora sí que los turcos tomaron la postura de hacerla cansada para al menos desquitarse un poquito. Lamentable.
No le hace ni cosquillas
Sebastián Sosa llegó al futbol mexicano para hacerle sentir pasos a Óscar Pérez, pero se ha quedado a muchos kilómetros porque el "Conejo" anda bastante tranquilo.
Dicen que a pesar de que el Pachuca movió cielo, mar y tierra para liberar una plaza de extranjero para el guardameta, por el momento está lejos, muuuy lejos de presionar al titular.
Los Tuzos primero apostaron por naturalizar a Ariel Nahuelpán y así dejarle un hueco al meta uruguayo, mismo que se les abrió con la salida del ecuatoriano Walter Ayoví, y así no lo pensaron dos veces para traerlo de una vez a México, ya que en el plan original llegaría hasta el final de este año.
Lo cierto es que las semanas pasan y Sosa no sólo no ha logrado inquietar a Pérez, sino que tampoco ha puesto en jaque a Alfonso Blanco, en gran parte por su falta de condición física.
Más le vale apretar las tuercas, porque en la Bella Airosa lo ven como el heredero de las glorias del "Conejo" y ha quedado claro que este club no se caracteriza por ser muy paciente con sus refuerzos.
Agarra hueso
El ex árbitro Ricardo Arellano casi casi se sacó la lotería.
Después de que a principio de año perdió el gafete FIFA y luego de tener un Clausura 2015 de altibajos el aguascalentense perdió su chamba como silbante, se ganó un muy buen hueso: hoy es el mandamás de la delegación arbitral en su tierra natal, que no es otra cosa que el hombre por quien pasa todo el desarrollo de los colegiados en esa entidad.
Pero si durante su carrera en el silbato no fue precisamente un ejemplo a seguir, no me quiero imaginar el futuro de los colegiados con ese maestro...
san.cadilla@reforma.com