En el televisor invariablemente nos topamos con un anuncio de agua protagonizado por Miguel "El Piojo" Herrera. Si tienes agruras, el mismo personaje nos recomienda un Melox. Para vender o comprar algo, el entrenador nacional -con perico huasteco sobre el hombro- nos invita a usar el portal segundamano.com. Si quieres ir de vacaciones, su abombado vientre exhibido en entalladas playeras polo
aparece promocionando el estado de Chiapas.
Lo mismo pasa con las compañías de telefonía móvil, tarjetas de crédito, campañas para la donación de órganos o vacunación. Y si crees que el "zapping" lo puede vencer, te equivocas, porque un día sí y otro también aparece en "Netas Divinas", "Miembros al Aire", "Chabelo", "Sabadazo", "Hoy", etc.
Bueno, hasta su señora madre estuvo en un concurso de dobles de su hijo. Su hija, "La Piojita", participó en el reality show "Baila si Puedes" y su esposa en otro llamado "La Isla".
Señores, el cruel futbol tiene la extraña capacidad de atormentarnos incluso fuera de la cancha y, como ejemplo, nos estamos fumando esta versión mexicanizada de las nalgonas Kardashian.
Pero todo esto tiene sentido. Miguel Herrera es un héroe nacional que primero nos salvó de la humillación de no ir al Mundial ganándole al diminuto Nueva Zelanda, luego evitó la humillación frente al anfitrión Brasil cuando Ochoa fue masacrado a quemarropa con balonazos al rostro, y selló la proeza cuando el pueblo lo excusó con aquel "no fue penal", contra Holanda.
A diferencia de Mejía Barón, Lapuente, Aguirre y La Volpe, que alcanzaron las mismas instancias mundialistas que "El Piojo", el pintoresco entrenador personifica a la perfección un engendro entre Arrigo Sacchi, Pepe El Toro, Cantinflas y Don Francisco.
Por desgracia, quienes lo conocemos tras su paso por Monterrey, sabíamos que tan pronto se esfumaran las victorias, "El Piojo" mostraría su espíritu antideportivo y fobia arbitral para encarar las derrotas.
Inmerso en el fracaso de la Copa América, Herrera, con claro vocabulario popular, enfrentó las críticas de su tuit apoyando al partido oficial el 7 junio, así: "No nos ganó Brasil por una pen... que hice en la mañana". Y agregó: "Hay un solo pen... que me ataca y ya saben todos quién es".
Si sólo hay un pen... que lo critica y, un 99.999 por ciento que lo apoyan, ¿por qué tanto enojo, Miguel? Además remató con dos joyas para la posteridad: "No puedo entrenar a los jugadores todos los días, ellos juegan con su clubes" (qué novedad), y "ya tengo los recursos para vivir tranquilo, sin preocupaciones".
Después de ver lo alcanzado por Cuauhtémoc Blanco y el Pato Zambrano, ¿no estaremos frente al futuro Presidente de la República del 2018?
Lo escrito, escrito está.
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