Calificación 7.0
El silbante mexicano, Roberto García, ofrece una actuación con buenas y regulares decisiones, sobre todo en el aspecto del uso de las tarjetas.
Parece que los equipos siguen con la misma característica de cometer infracciones, sin que los jueces centrales se atrevan a usar la tarjeta por infringir persistentemente las reglas.
Inicia bien al
minuto 4, al amonestar al charrúa, Abel Hernández, quien le pega a Paulo Da Silva, pero después, al 16', no hace lo mismo con Álvaro González, al pegarle al guaraní, Iván Piris, que bien pudo ser tarjeta roja. Y que después, este último, al 34', corta el avance y tampoco amonesta.
Sigue con su grave defecto de darle la espalda al balón, tratando de adivinar hacia donde va, a los minutos (18', 19', 27', 60', 85' y 92') los más marcados.
Termina usando seis amarillas, pero no influye en la conducción y en el resultado del partido. Con la eliminación de la Selección Mexicana bien pudieran usarlo en las siguientes fases.