El Rey de Chile
Algo tiene el futbol que hace sentir Rey a un hombre cuyo único talento es ser bueno con una pelota en los pies.
Chile está viendo a la generación más brillante de futbolistas en dos décadas, pero es probable que su Selección termine sin trascender porque es también la más indisciplinada.
Arturo Vidal es su gran figura, un guerrero en la cancha y
estandarte de la Juventus, que le pagará 12 millones de dólares al año en su próximo contrato, pero también un asiduo protagonista de escándalos que tienen que ver con la parranda y el alcohol.
Las penosas imágenes de su Ferrari rojo chocado a un lado de la carretera la madrugada del martes forman parte del más reciente incidente de una larga lista en el currículum del "Rey Arturo".
Cuando se habla del grueso de los futbolistas, porque cada excepción confirma la regla, la opinión general es que se trata de jóvenes con mucho dinero, demasiado tiempo libre, un bajo nivel de educación y escaso sentido común.
En el mundillo del futbol muchos parecen haber salido de la misma línea de producción; les resulta difícil abstraerse de estar a la altura de los demás, no de su juego, sino de la pose y el estatus que llegan cuando se vuelven famosos.
Así, muchos destacan por su futbol, otros por sus peinados de mohicana, tintes, accesorios, tatuajes, hebillas brillantes, zapatos de colores, autos deportivos, novias de la farándula, fiestas, borracheras, mujeres varias o mucha actividad en redes sociales.
DE ABAJO, MUY ABAJO
Arturo Erasmo Vidal Pardo (Santiago, 22 de mayo de 1987) es millonario y maneja un Ferrari. No se ganó la lotería y tampoco fue a la escuela.
Creció en un barrio marginal de El Huasco, un poblado de las periferias de la capital chilena. El "Rey" es el hijo pródigo de esa tierra.
Ahí comenzó a jugar futbol, en la calle, sobre la tierra y las banquetas, sin entrenamiento ni trabajo de técnica, solo por diversión, ante la mirada de la gente de su barrio, que recuerda con entusiasmo su habilidad con la pelota desde pequeño.
A los 25 años, su madre, Jacqueline Pardo, tuvo que hacerse cargo de cinco hijos, tras el abandono de su esposo, a quien no volvió a ver. Para solventar los gastos, trabajaba como empleada doméstica, lavaba y planchaba ropa ajena.
Arturo soñaba con ser jinete, pero encontró en el balón la solución a la situación precaria de su familia.
En el 2007, después de su tercer año como futbolista del primer equipo del Colo Colo, le regaló una casa a su madre.
El "Cometierra", como lo apodaban en el Cacique, había cambiado la vida de su familia y escalaba a la élite del futbol mundial. Con 20 años, se fue al Leverkusen, de Alemania, ya como figura del futbol chileno e integrante de la Selección mayor.
Arturo es un futbolista todoterreno. Comenzó jugando como central, pero fue conquistando espacios más adelantados en la cancha, hasta convertirse en media punta, gracias a su dinamismo, fuerza, despliegue físico y disparo potente con ambas piernas. Además marca goles, asiste a sus compañeros, recupera la pelota y es un líder en el campo. Un crack.
Desde el 2011 juega para la Juventus y es considerado uno de los mejores futbolistas del planeta.
Es probable que en una infancia plagada de carencias, Arturo aprendiera a salir adelante y a no ponerse límites... en ningún aspecto de la vida.
LA BENDITA FIESTA
La lista de incidentes de Vidal como figura pública comenzó en julio del 2007, en la Copa del Mundo Sub 20, en Canadá, cuando él y algunos de sus compañeros se enfrascaron en una gresca con elementos de la Policía de Toronto, después de la derrota de 3-0 frente a Argentina, en Semifinales.
Los futbolistas fueron esposados y llevados detenidos. Vidal aseguró entonces que los policías los habían insultado con expresiones racistas y habían abusado de la fuerza. Días después, Vidal fue titular en la victoria de 1-0 sobre Austria en el partido por el tercer lugar.
En noviembre del 2011, Jorge Valdivia, integrante de la Selección mayor de Chile, que se preparaba para enfrentar a Perú en las eliminatorias para la Copa del Mundo de Brasil, invitó a sus compañeros Gonzalo Jara, Carlos Carmona, Jean Beausejour y Vidal al bautismo de uno de sus hijos. Tenían permiso del técnico, Claudio Borghi, quien acudió a la fiesta y regresó temprano a la concentración.
Al día siguiente los cuatro llegaron tarde a entrenar y todavía borrachos. Fueron suspendidos por 20 partidos con la Selección, aunque los castigos se redujeron con disculpas públicas. El primero en ser indultado fue Vidal.
En la Juventus, el "Rey" también ha tenido incidentes, como el del 2013, cuando perdió un vuelo a Italia después de la fiesta por la clasificación a Brasil 2014. El club le puso una multa y el técnico, Antonio Conte, lo mandó a la banca.
En octubre del 2014 tuvo una pelea con otro cliente de un centro nocturno de Turín, del que fue sacado del lugar a las 5:30 de la madrugada por los guardias del lugar. También llegó tarde a entrenar, se ganó una nueva multa y Massimiliano Allegri lo dejó de suplente.
El martes, Vidal aprovechó el permiso del técnico Jorge Sampaoli, en plena Copa América, para acudir a un casino con su esposa. Ahí, según dijo, solo se tomó dos tragos, aunque no dijo de qué tamaño. Dio positivo en la prueba de alcoholemia y fue arrestado, no sin antes intentar intimidar al policía que lo sometía. "Espósame, pero te vas a cagar a todo Chile".
Primero publicó un video en Twitter en el que decía que el accidente no había sido su culpa y que estaba bien de salud, pero unas horas después ofreció disculpas en una conferencia de prensa y derramó lágrimas.
"Les fallé a todos. Quiero disculparme con mis compañeros, con el cuerpo técnico, con la gente, con todo un país", afirmó.
Vidal no fue castigado y seguirá jugando la Copa América, como la gran esperanza de Chile en busca de un título continental, como anfitrión y con un grupo de futbolistas brillantes, pero también muy alegres.
ASÍ NO SE PUEDE
La Roja tiene una amplia colección de incidentes relacionados con indisciplina. Vidal es la figura, el más mediático del momento, pero solo se ha limitado a seguir la tradición.
Mientras Arturo jugaba el Mundial Sub 20 Canadá 2007, sus futuros compañeros en la Selección celebraban su pase a los Cuartos de Final de la Copa América de Venezuela con una fiesta en su hotel, en Puerto Ordaz, con autorización del DT, Nelson Acosta.
Muchos terminaron borrachos, acosaron a varias camareras y protagonizaron una guerra de comida con pedazos de jamón como proyectiles. En Cuartos, Brasil goleó 6-1 a Chile y Acosta perdió el puesto, por la goleada y la parranda.
En lugar de Acosta llegó Marcelo Bielsa, de estricta disciplina. Con él no hubo incidentes, por lo menos que se hayan hecho públicos. Pero el "Loco" se fue en el 2011, después del Mundial de Sudáfrica, y los de la Roja volvieron a las andadas.
En junio del 2012, Gary Medel y Eduardo Vargas fueron expulsados de la Selección porque aprovecharon su descanso para irse de fiesta a un antro de Santiago, del que salieron a las 4:00 de la madrugada. Al explicar su salida del plantel, el técnico Claudio Borghi declaró que ambos necesitaban descanso.
David Pizarro, delantero y una de las figuras del futbol chileno, con una trayectoria de 15 años en Europa, dejó de acudir a la Selección en el 2006, tras no clasificar al Mundial de Alemania y fastidiado por los constantes episodios de indisciplina en el equipo.
Ni siquiera Borghi, quien jugó con él en el Santiago Wanderers; Bielsa, con su rigidez disciplinaria, o la Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, pudieron convencerlo de volver.
Sampaoli, discípulo de Bielsa y del mismo estilo de disciplina, logró que acudiera a su llamado en el 2013, en el camino rumbo a Brasil 2014. Hoy, a sus 36 años, es parte de la Roja en la Copa América, con el equipo de nuevo en el ojo del huracán.
Pizarro tuvo dos oportunidades de jugar la Copa del Mundo, en 2010 y 2014, pero no lo hizo.
LA CABEZA... PARA REMATAR
¿Qué habría sido de la carrera de Diego Maradona sin parrandas, alcohol, excesos o drogas, o de otros, como Ariel Ortega, Paul Gascoigne, George Best, Garrincha, Adriano, Ronaldinho... y tantos más?
Los futbolistas son jóvenes, están llenos de energía, dinero y fama, y a final de cuentas dirán que son seres humanos y, como todos, tienen derecho a divertirse, a tomar una copa o dos.
Pero probablemente más bien están convencidos de que, por su bendito talento con el balón, durante los escasos años que durará su carrera les alcanzará para darse vida de reyes y tener mucho más de lo que la mayoría de la gente de su edad proyecta para un futuro lejano.
Muchos son buenos con los pies y la cabeza la usan, a veces, para rematar.
¿Para qué querrían más?
Es pregunta.
Mail: san.cadilla@mural.com
Twitter: @SanCadilla