Otra vez, en nuestro peculiar balompié, las semestrales "emociones numéricas" por encima de las futbolísticas.
A esta Jornada 17, última de la fase regular, llegaron clasificados para la Liguilla el Veracruz, los Tigres y el Atlas; los tres con 28 puntos, pero la escuadra veracruzana con mejor diferencia de goles.
¿Aseguró ayer ese primer lugar el ejemplar conjunto
jarocho?
Después las Chivas y el América, con sus 26 unidades, necesitan sólo un punto para conseguir su boleto, menos accesible para las Águilas, porque visitan hoy al Atlas, mientras que las Chivas recibirán mañana al sotanero Morelia ya conociendo todos los resultados y por lo tanto sabiendo si siguen necesitando ese punto o no.
El Cruz Azul, con 25, aseguraría su clasificación con una victoria, al igual que los Xolos y el Santos-Laguna, actualmente con 24.
Tanto cementeros como laguneros serán coprotagonistas, esta noche y en sus respectivas canchas, del último capítulo de la lucha entre la UdeG y el Puebla por permanecer en el máximo circuito; y en ese capítulo final cualquier combinación que no sea la del triunfo tapatío y la derrota poblana, hará descender a los Leones Negros.
Para ir completando la lista de NUEVE equipos en pos de los CINCO boletos disponibles, el Toluca, el Querétaro y el Monterrey (los tres con 23 puntos después de 16 partidos) llegaron a esta última jornada con la necesidad de obtener un triunfo y esperar otros resultados para meterse en la fase final.
¿Se acercó ayer a ella el Querétaro tras recibir a los Jaguares, se acercará hoy el Monterrey a costillas de los eliminados Pumas, le quedará para mañana alguna posibilidad al Toluca ante los clasificados Tigres?
Y el Pachuca, con 22, todavía mantenía ciertas esperanzas (¿Qué tanto las mantiene después de su visita a cancha veracruzana?).
Por obra y gracia de los dirigentes, en esta jornada cada quien juega a la hora que quiere, con la ventaja que eso puede darles a equipos que al momento de jugar ya sabrán lo que les conviene.
Pero al margen de esa inequidad, el caso es que para variar a esta última jornada se llega con las tradicionales "emociones numéricas" que no siempre encuentran el debido sustento futbolístico.
Después de disfrutar el miércoles del Barcelona vs. Bayern Munich, un partido de ésos que solamente se ven una vez al año, con una actuación como la de Messi (que nada más él puede ofrecer) lo menos que podemos desear en nuestro sui generis futbol mexicano es que en jornadas como la de ahora cada equipo sea capaz de jugar de acuerdo a los objetivos que persigue.
Que para mañana, por favor, podamos hablar de los OCHO mejores en la Liguilla... y no sólo de los ocho menos malos.
¿Será mucho pedir?
gomezjunco@mural.com
Twitter: @rgomezjunco