Para la última Jornada, los designadores vuelven a usar diferente criterio en el uso de los silbantes.
"Paran" al joven César Arturo Ramos por no sancionar el penal cometido de Emanuel García sobre Jonathan González en el UdeG-Veracruz, pero no lo hacen con Luis Enrique Santander, quien inventa la pena máxima no obstante que la falta de Jonny Magallón es fuera del área en
Puebla-León.
Misma situación con Roberto García, quien no quiso decretar el penal cometido por Alfredo García sobre Alejandro Vela estando a dos metros escasos de la acción en Pumas-Cruz Azul o también con Francisco Chacón, quien no se atrevió a sancionar el penal cometido por Jesús Molina abrazando flagrantemente a un jugador tuzo en Pachuca-Santos.
Qué decir de Fernando Guerrero, quien en América-Toluca no expulsa a Moisés Muñoz después de cometer un penal sobre Édgar Benítez, malogrando una oportunidad manifiesta de gol, así como inventar otra pena máxima a Alfredo Talavera, cuando la falta cometida por este portero es fuera del área, influyendo en la conducción y resultado del partido, pero lo premian dándole uno de los partidos fundamentales del descenso.
Como verán, aquí cabe aquel adagio "según el sapo es la pedrada", pero esperemos que a Ramos no le haga mella en su estado anímico y psicológico este partido, pues recordemos que está próxima su asistencia al Mundial Sub 20 a celebrarse en Nueva Zelanda.
Twitter: @BoniNunez
