Un triste caso
En 2008, un chiquillo de 14 años llamado Eddy Vallejo acaparó los espacios noticiosos al confirmarse que partiría al Mallorca, sin permiso del Pachuca.
El club español le ofreció un contrato de siete añotes al canterano de los Tuzos, descubierto dos años antes en Colima, luego de que lo vieron brillar en un torneo internacional con un Tri Sub 15, dirigido por
Jesús Ramírez , y les dijo que era libre.
Ustedes saben que en Pachuca dejados no son, así que exigieron un pago por los derechos federativos y se armó un pleitazo que llegó hasta FIFA, que finalmente le dio la razón a Jesús Martínez y compañía.
Pues la manzana de la discordia hoy se marchita en el total olvido.
El chavo no pudo firmar con el Mallorca, tuvo que regresar a México pero nomás no despegaba; lo enviaron al León Sub 20 para que despertara... pero como siguió dormido, lo prestaron al Zamora, de Tercera, con tal de que jugara.
Molesto por la situación, Eddy peleó por adueñarse de sus derechos federativos, se la hicieron cansada e incluso por eso mismo perdió una oportunidad de fichar con el Atlante en el Ascenso MX.
Cuando finalmente lo liberaron, no le quedó otra que jugar con el Tecamachalco de la Segunda División, pero con un sueldo tan bajo (menos de 5 mil pesos mensuales) y con tal impuntualidad en los pagos que de plano prefirió retirarse temporalmente y mejor administrar ¡un negocio de nieves en Durango!
Eddy, actualmente de 21 años, sigue en espera de que, como ocurrió hace años, cuando los promotores le hablaban al oído y le pedían que firmara con ellos ofreciéndole el cielo, la luna y el mar, ahora le echen un grito para tratar de reactivar su carrera.
Pasos en la azotea
Ya les había platicado que todo caminaba para que Tomás Boy no siguiera al frente del equipo para el siguiente torneo, pero parece que es el mismo "Jefe" el que trae prisa.
¿Quién no ha escuchado que ya golpeó a un aficionado? ¿Que ya se hizo de palabras con un técnico? ¿Con un jugador rival? etecé, etecé y más etecé; pues ayer en Las Palomas dio muestras de que ya siente pasos en la azotea.
Llegó tarde como siempre a las instalaciones de la colonia El Briseño, y cuando se dio cuenta que Aldo Leao Ramírez daba una rueda de prensa, sin bajarse de su auto deportivo, de inmediato pidió ¡que pararan la conferencia! ¡háganme el favor!
Le puso una gritoniza a su secretario técnico, Mario Ruiz, y posteriormente mandó a su cuerpo técnico por el méxico-colombiano.
Aprovechó para pedir que sacaran a la prensa antes de su entrenamiento y, como siempre, todos los trabajadores del club sólo agacharon la cabeza y le hicieron caso.
Su problema parece ir más allá de la cancha, pues nomás anda viendo cómo regaña a los periodistas o cómo desmiente información, mientras su equipo se aburre de calentar y de esperarlo.
Digo, todo esto es un reflejo más de su singular forma de ser -por decirlo de alguna manera- que ha provocado que, pese a tener 17 triunfos en el año futbolero, no sea santo de la afición atlista.
¿Qué creo que a pasar? Para mí que se va de Atlas y reaparece en Morelia haciendo rabietas.
¿Le apuestan?
Mal tino
Todavía no entiendo qué le vio la UdeG a Juan Anangonó para traerlo como refuerzo y así salvarse del descenso.
Digo, después de ver las opciones que tenían en cartera para delanteros y que desecharon no sé si por falta de lana -que con el contrato de TV y el préstamo del Sindicato no creo- o por alguna otra razón nórdica (¡Saludos al "Vikingo" Dávalos), pero chequen nomás .
La lista para goleador de los Leones Negros era como de 45 jugadores y entre ellos destacaba el mismísimo Roque Santa Cruz, pero también aparecían Yimmi Chará, Cristian Penilla, Yorleys Mena y Christian Suárez; bueno, hasta Matías Alustiza aparecía en la carpeta.
Finalmente apareció AnangoLOL, su DT lo sostuvo contra todo, pese a que el equipo ganó cuando no estuvo en la cancha, pero me parece que el resto es historia.
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