Cuando me "encabrito" con los técnicos que priorizan evitar que les anoten, teniendo en su plantel la capacidad necesaria para hacer lo contrario, es por un motivo lógico: que no le quiten al futbol lo más hermoso que tiene.
El gol del "Chicharito" Hernández, que le dio el pase al Real Madrid a la Semifinal de la Champions League, ha dado la vuelta al mundo y al jugador mexicano lo ha
colmado de elogios.
Aquí, en México, ya ganó hasta el derecho de, en un futuro, candidatearse para una alcaldía y, por qué no, buscar alguna gubernatura.
También mandaron a la banca al francés Karim Benzema, que con todo respeto es mucho más jugador que Javier Hernández, perdónenme ustedes.
Dentro del partido, el "Chicharito" había ejecutado una interesante función. Se desmarcó bien, hizo paredes y mantuvo preocupada y ocupada a la defensiva rival, pero de no haber logrado la anotación, sus fallas frente al arco rival hubieran tenido una connotación muy distinta.
La importancia y el momento del gol anotado convirtieron lo que serían burlas y críticas en aceptación y elogios. Las varias opciones de goles desperdiciadas por el mexicano fueron totalmente olvidadas y abrieron paso al reconocimiento.
En horabuena para el "Chícharo" Hernández, que al empujar el esférico hacia adentro del arco se quitó la capa de villano para vestirse de héroe.
Ésa es la magia del gol y realmente me molesta que todavía hay técnicos que tienen como prioridad evitarla.
Y HABLANDO DE MÁGICOS GOLES...
Sin Cardona en la cancha, los Rayados están obligados a anotar más goles que el rival, si quieren mantenerse con vida en el torneo.
El adversario de los Rayados parece a modo, pero seguramente, después de su contundente victoria frente a Cruz Azul y de ver el baile que le puso Tigres a Monterrey, los Monarcas deben estar pensando lo mismo.
Mientras que en la cancha la maquinaria rayada sigue sin funcionar adecuadamente, fuera de ella Mohamed empieza a dar signos de que habrá varias piezas nuevas para el siguiente torneo.
Sin querer queriendo, "Tony" Mohamed hizo un relampagueante análisis de su equipo y dejó en claro que requiere un centro delantero y que le gusta jugar con un solo contención, así que Mejía o Zavala tienen un pie fuera de los Rayados y habrá aún más cambios.
Fue un rápido análisis que me dejó la impresión de que están aceptando que no les alcanzará para clasificarse. Toco madera.
En mi rancho dicen que mientras hay vida, hay que luchar.
¿Y LOS TIGRES, APÁ?
Sólo dependen de ellos mismos, son más que su rival en turno y si saltan a la cancha del Querétaro con la misma intensidad con que lo hicieron en el Clásico, seguramente regresarán con un buen resultado a casa.
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