No sé con exactitud cuándo o dónde inició el Clásico Regio. Los antiguos dicen que el primero se jugó en la Segunda División. Pero de lo que sí estoy seguro es que, desde las cinco de la tarde del sábado 13 de julio de 1974, el partido Tigres contra Rayados del Monterrey jamás ha terminado.
A base de majestuosos goles, amargas derrotas, apasionadas broncas e inolvidables jugadores, la
rivalidad de nuestros dos equipos sólo nos confirma lo que Eduardo Galeano formulaba: "un hombre no está hecho de células, sino de historia".
Pero no olvidemos que es el apasionado aficionado quien aloja el tiempo en sus huesos, en su piel, en sus ojos y, desde la tribuna, gustoso sigue y seguirá pagando el costo de la ilusión. Sin ellos, ¿qué sentido tiene el futbol? Sin ellos, un partido entre Tigres y Monterrey jamás hubiera iniciado.
Si usted es de los que busca respuestas fáciles a temas complejos, de seguro preguntará de la misma forma que lo ha hecho en las 103 ediciones pasadas: ¿quién va a ganar este sábado?
Sobra decir que las estadísticas nunca han sido la medición ideal para atinarle al marcador. Los dos puntos que hoy separan en la tabla general al local del visitante tampoco descifran algo.
También pareciera que el Monterrey cuenta con más gol y esta condición se exponenció con la llegada de Mohamed, porque, como dato, de las 22 anotaciones acumuladas en el torneo, 16 son con tutoría del "Turco", donde Pabon aportó cuatro y el grandote de Cardona, cinco. Aunque el equipo de Ferretti tampoco esconde lo suyo con las 10 anotaciones que lleva la dupla Sobis-Guerrón.
Pero si hacemos una disección de las líneas, en el medio campo, por ejemplo, Rayados le carga demasiados metros a Neri Cardozo, mientras que los Tigres, cuando forman el 4-3-3, reparten el mismo perímetro con dos interiores (Dueñas y Pizarro).
Posiblemente sea sobre las bandas donde tome rumbo el partido, porque Severo Meza se topará con Damián Álvarez, el "Chispa" Velarde a Guerrón, el "Gutty" Estrada o Israel con Edwin Cardona y Torres Nilo a Barrera. De estos cuatro duelos, creo, por lo mostrado en el torneo, que los de Ferretti podrían tener sólo un mano a mano con relativa desventaja.
Y para rematar, los Rayados también tienen que vencer a Nahuel y los Tigres a Jonathan, para marcar gol. De haber un perdedor, ¿quedará herido de muerte?
PD: "Los amigos suelen ser sinceros; los enemigos realmente lo son. Por esta razón es un excelente consejo aprovechar todas sus censuras. Es algo similar a la amarga medicina".
Arthur Schopenhauer, filósofo alemán.
Lo escrito, escrito, está.
castillejos@elnorte.com
Twitter: @castillejos_m