Si Gustavo Matosas no encuentra el momento apropiado para morir con su idea de trabajo, la idea que lo llevó al América, que hizo que la directiva se fijara en él, porque él no va a cambiar, según lo dijo, no tiene pensado cambiar esa idea en 10 o 15 años, el futuro es muy difícil. A ver qué pasa, sobre todo en el futbol.
Si Matosas requería un empujón de la directiva, un respaldo, un
reconocimiento, una mejor relación, más cordial en un momento difícil, al recibir siete goles en una semana, ¿qué es lo que pide? Matosas utiliza una palabra que es determinación: de la directiva, de los futbolistas, que él considera que es muy importante en la vida, y, sobre todo, responsabilidad.
Pero la responsabilidad recae en él, en los jugadores y en la directiva, la responsabilidad de liberar al futbolista y, sobre todo, el asumir el liderazgo. Matosas tiene que ser el líder del América, no puede serlo Ricardo Peláez, no puede serlo nadie más.
Seguramente los enredos vendrán porque Matosas es un tipo preparado, que ha triunfado, que le ha ido bien, que hizo del León, un equipo chico, un equipo grande, muy importante, bicampeón del futbol mexicano, que sacó jugadores formidables que hoy están en la Selección.
Que Matosas haya tenido en Veracruz, en los túneles del estadio Luis "Pirata" Fuente, un momento de indecisión, de baja moral, puede ser que la haya tenido, que Peláez lo quiso detener para que no fuera a la conferencia de prensa, también, porque tenía miedo que Matosas en conferencia de prensa dijera: "Me voy".
Pero no es así, Matosas requiere continuidad, sabe dar resultados, requiere apoyo y respaldo; si los jugadores, que son una mezcla de lo que queda de Miguel Herrera, de lo que queda de Antonio Mohamed, que es mucho, de las nuevas contrataciones que venían para el "Turco", y que finalmente fue despedido; Matosas no formó el equipo, el equipo fue formado por alguien más, yo creo que por Peláez.
Matosas debe de reconocer que su equipo no anda bien, él tiene que hablar y dar la cara, porque si habla Peláez, entre que se quiere hacer chistoso, simpático con el periodismo, quiere hacer alguna graciosada, quiere tomar en broma ciertas cosas, quiere demostrar que el América es grande porque él está ahí, ¡no!
El liderazgo, la determinación, la responsabilidad, el campo de juego y los resultados es de todo el equipo, pero hay un líder y se llama Gustavo Matosas.
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