Necios hasta la muerte
Si bien el sábado La Sangre Azul se quedó con ganas de meter sus instrumentos al Estadio Azul, no faltó el barrista que llegó con algún tambor.
Me enteré que algunos miembros de este conflictivo grupo arribaron con sus instrumentos con la intención de meterlos al inmueble, pese a que La Sangre fue castigada por el pleito en el anterior duelo en casa con
la prohibición de meter lo que fuera.
Media hora antes de que arrancara el Cruz Azul-Atlas, tres barristas llegaron a las inmediaciones del inmueble con sus tradicionales tambores, pero no piensen que porque no supieran de la sanción, sino porque tomaron la actitud de que en una de esas, sí entraban, lo cual no sucedió, pues sus líderes les pusieron una regañiza y casi me los dejan sin boleto.
Me queda claro que algunas maderas nomás no agarran el barniz...
Cuando los hermanos se reencuentran
Crecieron juntos, fueron parte del plantel de Pumas durante 10 años y compartieron el área felina 4 años.
La separación debió ser algo muy duro para los hermanos Palacios, pues además de todo, fue en condiciones amargas, ya que Alejandro se recuperaba de una operación en un hombro cuando se enteró a mediados de diciembre pasado que su hermano Marco ya no era requerido por el club para el Clausura 2015.
Entre la nostalgia y el llamado de la sangre, el arquero universitario no se aguantó hasta el domingo para ver a su carnal en el Estadio Olímpico Universitario previo a la visita del Morelia, y por ello se lanzó la noche del sábado al hotel de concentración de los michoacanos, donde felicitó a su hermano por su cumpleaños 34, celebrado el viernes.
El "Pikolín 2" tuvo que esperar unos minutos a su brother, quien era "víctima" de un puñado de aficionadas que le llevaron presentes y felicitaciones por su aniversario, las cuales pronto se hicieron extensivas para el guardameta, quien así pasó un rato de calidad con su hermano.
Al día siguiente no hubo ni necesidad de que Alejandro bajara al campo, pues el tiempo para ponerse al tanto de los chismes ya lo habían compartido la noche anterior.
'Error' que se agradece
Y ya que andamos en los rumbos de la UNAM, déjenme les platico que el domingo, por primera vez desde que se estrenó la pantallota en el Estadio Olímpico Universitario, pasaron la repetición de un gol.
Yo no sé si el operador de la misma se quedó jetón con el soporífero espectáculo que estaban dando Pumas y Morelia, pero tras la anotación de Eduardo Herrera, en lugar de cortar la transmisión televisiva y poner tomas de la tribuna como suelen hacerlo, los 15 mil valientes que se fueron a rostizar a CU pudieron ver repetida en gran formato la maniobra del atacante de Pumas mientras este aún festejaba.
Después de esto supongo que le dieron un zape al encargado de la pantalla, porque ya no pasaron las repeticiones de los otros dos goles, por lo que la alegría fue más bien efímera.
san.cadilla@reforma.com
