Por supuesto que había que sufrir.
Ganar en Brasil no cualquiera lo hace. La Copa Libertadores tiene parte de su denominación de origen en la tierra visitada por el
Atlas, angustiado en varios lances del primer tiempo pero siempre con gran moral.
Lo sucedido en la segunda parte fue magnífico. El equipo rojinegro fue valiente, determinado, inteligente y mejor que el adversario.
Tanto, que la ventaja debió ser superior. El 1-0, de cualquier manera, sabe a gloria y reporta tres puntos.
El paladar no se confunde: tiene más impacto ganar en una tierra casi inexpugnable que perder en casa cuando no se debía. Si la presentación rojinegra en el Jalisco generó críticas y desconcierto por distraída y blandengue, vencer al Atlético Mineiro en Brasil compensa el sinsabor aunque en la tabla solamente se recuperó lo perdido.
A Tomás Boy le viene muy bien el triunfo: es el segundo -y primero de visita- en su historial como técnico en la Libertadores. Una foja que constaba de siete partidos antes del jugado anoche.
América en dos ocasiones, Chivas, Tijuana y León eran los únicos clubes mexicanos que alguna vez vencieron en Brasil. Ocasiones contadas pero importantes. Históricas por escasas.
La irregularidad de los equipos no encuentra explicación ni con una lectura de tarot. Atlas pierde en casa contra Santa Fe y Pachuca. Luego gana en Torreón y ahora en su visita al Atlético Mineiro. El mundo al revés.
Los equipos mexicanos acrecientan su prestigio en la Libertadores. Aunque el arribo a las rondas más adelantadas se ha espaciado en los últimos años, campanazos como este, con los merecimientos del caso, alimentan lo que se empezó a escribir con aquella Final jugada por Cruz Azul contra Boca en el ya lejano 2001.
La competencia es importante: hace crecer al futbolista al enfrentarse a condiciones adversas empezando por el largo viaje empotrado en un calendario con fórceps. Tanto, que ahora hay que regresar de Brasil, recibir a Veracruz y volver a subirse a un avión para jugar en Santiago contra Colo Colo. Aunque algunos jugadores se quedarán en Sudamérica para evitar tanto trajín, hay afectación física.
Qué vaya a pasar con el Atlas o los mismos Tigres en la edición actual es imposible de saber por ahora. Aunque la decisión de los norteños por darle importancia de equipo titular al actual certamen y el triunfo atlista hacen pensar con optimismo tras la eliminación a la primera de Monarcas, más ocupado en otras cosas durante el actual semestre.
América remató la noche ganando en San José 3-0 al Saprissa. Pese a tener momentos difíciles como en CU el domingo, terminó ganando. Bendita es esa costumbre.
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