En la arquitectura, música, moda, tecnología y, por qué no, hasta en el futbol, la sencillez es la máxima sofistificación.
Los grandes entrenadores, al igual que los mejores formadores de talento, transmiten simplicidad profunda del juego, con el único propósito de que el futbolista actué de forma intuitiva en vez de suponerles un desafío, pero entendamos que también se requiere intelecto
para que algo resulte sencillo con soluciones elegantes.
Como si fuera parte del movimiento artístico, el buen futbol también es minimalista, porque sólo empleando lo mínimo se logra toda ausencia de desorden.
Hoy, en la Liga Mx, cuatro equipos que en términos monetarios no representaban ninguna amenaza, como es el caso de Jaguares, Tijuana, Santos y Veracruz, conquistan a base de simplicidad, jugadores discretos y entrenadores escasos de títulos, los primeros lugares de la competencia, superando, momentáneamente, a muchos de los que suponíamos mejores.
Pero si en nuestra Liga el poderoso dinero ya no representa una fulminante ventaja, sólo nos queda deducir que para saber descartar lo malo y acaparar lo bueno antes que todo lo demás se requiere conocimiento (knowledge).
A diferencia de Tigres o América, el Monterrey se ha empecinado en reconstruir su plantilla con jugadores base que nunca han trabajado en México (Morelo, De Jesús, Ramos, Estefan, Rojas, Chará, Mejía, Cardona y Pabon).
Los Tigres, en cambio, han optado por gastar más dinero a cambio de disminuir el riesgo al fichar extranjeros que antes demostraron su eficiencia en nuestro futbol (Mancilla, Danilinho, Damián, "Cacha", Burbano o "Gringo" Torres).
Y América también ha adoptado la misma estrategia con Darwin, Pellerano, Aguilar, Sambueza y Arrollo.
Reitero: comprar en el mercado nacional es mucho más caro, pero a cambio se tiene más información confiable de la compras en cuestión, además de debilitar en la cancha a los clubes vendedores, mismos que directamente también son tus rivales.
O usted dígame: ¿de dónde han llegado en los últimos torneos los fichajes menos productivos de Tigres y América?, ¿del mercado nacional o del internacional?
Por lo pronto, los de la "U" volvieron a ganar ejecutando con criterio la idea que desde hace rato dominan. El equipo de Ferretti debió marcar más goles, porque de los 19 intentos, ocho de éstos fueron con dirección al marco. Y con buen augurio, el brasileño Sobis se presentó con frescas ideas en zona de definición.
Del otro lado de la ciudad, el Monterrey sigue nutriendo la nada grata etiqueta de "plantel manso", con apenas 48 remates en cinco partidos, dos menos que la UdeG y nueve menos que el Puebla. A Carlos Barra se le terminaron muy rápido las excusas. ¿No cree usted?
PD: "Quien no añade nada a sus conocimientos, los disminuye". El Talmud.
El buen futbol también lo hacen los buenos dirigentes.
Lo escrito, escrito está.
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