Verdes de coraje
Alguien está enojado con el Atlas y no es la gente de la UdeG.
Se trata de un técnico que fue defensa, dirige a un equipo de verde y no es Pedro Caixinha. Se trata de Raúl Gutiérrez, el técnico de las Selecciones Sub 20 y Sub 22.
El "Potro" y la Dirección de Selecciones están que se comen a los Zorros por el ya conocido tema de Alfonso
González.
La gente del Tri menor fue enterada de que Ponchito estaba lesionado y no iba a ser tomado en cuenta por Tomás Boy para el juego contra la UdeG y no asistiría, por ende, a la del equipo de "Potro", que inicia hoy.
Pero se levan la sorpresa de que, después de que el miércoles recibieron una carta de los Zorros que decía que González no había sanado de un esguince en su tobillo derecho, lo vieron en la cancha en el juego de ayer. González fue titular y lo peor del caso es que se resintió.
Al calor del juego
En la Jornada 4 el Guadalajara fue beneficiado por una decisión arbitral errónea, pero el viernes resultó perjudicado, porque el gol de la derrota frente al Santos fue en fuera de lugar.
Y en ese partido contra el Santos, hubo un nuevo clavado de un futbolista de las Chivas, aunque en esta ocasión no fue marcado como penalti. El saltarín fue Érick Torres, quien cayó en el área al minuto 90.
La jugada causó enojo en el presidente del Rebaño, Néstor de la Torre, quien fue captado por cámaras de video justo cuando reaccionaba con palabras altisonantes por la acción del "Cubo". El momento fue ventaneado anoche por TV Azteca.
Este tipo de comentarios son el pan de cada día en el futbol, pero una cosa es que se diga en público y otra en un palco, donde el directivo asume que tiene privacidad y habla al calor del juego.
Me imagino que platicará con el jugador, pues Carlos Fierro fue suspendido tras la Jornada 4 por la Comisión Disciplinaria por fingir una falta y ahora el "Cubo" quiso pasarse de vivo, como hace dos años.
No entienden
No sé que tendrá que pasar para que los pateabalones entiendan.
No es tanto porque sean quemados de que andan en antros, gastando lana y desaprovechando horas de descanso, sino que el tema de la seguridad no les ha quedado muy claro.
¿Tendrá que suceder algo similar a lo de Salvador Cabañas?
Parece que Matías Vuoso no se acuerda de ese capítulo; de lo contrario, habría evitado lo del sábado en el antro tapatío Evva, donde le soltó un golpe a un seguidor que se acercó a saludarlo.
Ya eran las 5:00 de la mañana y se le veía medio trastornado, pero, como todo mundo, finalmente no sabe con quién puede toparse. En esta ocasión, no pasó a mayores.
Testigos afirman que se veía dañado, no sé si por las bebidas espirituosas o por trasladarse por vía terrestre desde León, donde los Jaguares jugaron.
A sus anchas
¿Quien no quisiera ser Ronaldinho? Es una estrella del futbol mundial, gana un montón de dólares, tiene mucho juego todavía y se da el lujo de hacer lo que quiere con la directiva del Querétaro.
Si no, ¿por qué tendría que haber viajado a Veracruz en un avión distinto al del equipo?
El brasileño no se trasladó junto con el conjunto de Ignacio Ambriz, sino que llegó al Puerto por su parte.
Tampoco lleva la dieta del equipo, pues mientras sus compañeros le pegan al bufete que les arma el nutriólogo, él anda comiendo en restaurantes fuera de la concentración.
Chulada de maíz prieto, pero por eso tiene dos tipos de público.
Por un lado están quienes lo aman por lo que hizo en Europa y le muestran su cariño, como el viernes en Veracruz, donde le dijeron "Te amo" en un letrero con arena en la playa frente al hotel donde se hospedaban los Gallos Blancos.
Pero también están los que piensan que sus fiestas y tratos preferenciales no ayudan al equipo.
Mientras que son peras o manzanas, gran vida la de Ronaldinho en Querétaro.
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