San Cadilla
en CANCHA


Viejos conocidos
 
No fue casual el revire de Decio de María hacia Chivas con el tema de la sanción a Clavaditos Fierro, ejem, digo Carlitos.

Obviamente el recado del titular de la Liga MX iba dirigido a Néstor de la Torre, presidente del Guadalajara, quien a través de este H. periódico se inconformó del deficiente trabajo de la Comisión Disciplinaria.

Quizá no lo

recuerden, pero pues ya ven que yo soy muy memorioso, y pues Decio y Néstor trabajaron juntos en Selecciones Nacionales, bueno, mejor dicho coincidieron en el Tri, porque en aquel entonces sacaron chispas. Les cuento.

Necio era Secretario General y disfrutaba de llevarse a pellizcos y bromas con los seleccionados, y lo mismo viajaba con chamarra verde en el autobús del Tri que aparecía en la cancha haciendo señas a aficionados rivales dignas de cargadores del Mercado de Abastos (con todo respeto para los cargadores del Mercado de Abastos).

De la Torre puso orden, pues las confiancitas de De María no gustaban a varios, pero no se animaban a decírselo, así que reglamentó que no apareciera ningún colado ni directivo en sitios que no les correspondían.

La bomba entre ambos surgió cuando Néstor -en su papel de director de Selecciones- multó a 11 hombres, entre quienes estaban Javier Hernández, "Maza" Rodríguez, Carlos Salcido y Yamilé... ejem, bueno, a este último no lo multaron, pero también andaba dentro de la bola (literalmente) en aquella famosa fiesta de Monterrey.

¡Ya no me distraigan! El chiste es que Decio aprovechó la tormenta y junto con Justino Compeán, luego de la famosa carta que intentó leer Héctor Moreno, le sugirieron a Néstor que se disculpara con los pateabalones.

¿Pueden creerlo? A estos muchachazos sólo les faltó meter a un burro en tanga a su orgifiesta de muuuy amplio criterio, y De la Torre tenía que pedirles perdón.

Por supuesto que Néstor no aceptó y renunció al cargo al sentir que lo dejaron solo. Al día siguiente, Decio cuestionó públicamente la falta de autocrítica de De la Torre y su actitud inflexible. Desde entonces la química entre ambos desapareció.

Ahora Néstor en su rol de directivo, se cruza con una situación en la que sale en defensa de su Club, mientras que Decio buscará defender a su Liga y sus Comisiones.

¿Chocarán los trenes? ¡Saquen las palomitas!

 
 
Desfile de DTs
 
El martes pasado, Luis Miguel Salvador y José González Ornelas, hombres que deciden el futuro de Rayados, tuvieron una junta larga y tendida que inició en las oficinas del club y concluyó varias horas después en la sobremesa de un restaurante de la Sultana del Norte.

En dicha charla manejaron una lista de candidatos para tomar el puesto de Carlos Barra, quien tiene las horas contadas como DT del Monterrey.

¿Los nombres? Omar Labruna, quien dirigió a los clubes chilenos Everton y Colo Colo; Enrique Meza, probado "enemil" veces en el medio local y quien tiene puros "buenos muchachos" como jugadores (bueno, eso siempre dice él).

¡Claaaro! Por supuesto que Salvador, quien es más lavolpista que el propio Ricardo Antonio La Volpe, puso sobre la mesa a su dios, pero la discusión fue efímera por los "quemones" del "Argemex".

Cuando se volaron la barda fue al final, pues tocaron la posibilidad de fichar a un ex técnico del Sevilla y a quien hace un mes echaron del Olympiakos de Grecia: Miguel González "Míchel".

Sí, ya sé que es un referente del futbol español, pero el ex madridista es algo así como el Jorge Campos español, en su etapa de comentarista de televisión.

"Pues al final no ha venido nadie, eh...", dijo Míchel en un Real-Roma jugado a puerta cerrada; "yo creo que en este partido o empatan o gana uno de los dos", comentó en otra ocasión; o la famosa: "No cabe duda de que si quieren meter un gol el balón tiene que ir entre los tres palos".

Bueno, lo que es un hecho es que vienen cambios.

 
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