"Las personas que están lo suficientemente locas como para pensar que pueden cambiar el mundo, son las que lo cambian".
Anuncio "Piensa Diferente", Apple, 1997.
¿Se puede aplicar la cultura de Steve Jobs al futbol?
Un hombre que desde la cochera de su padre y con 450 dólares en la bolsa termina aniquilando a gigantes como a los "Manchester United" de la
informática (IBM y Xerox), sin duda dejó un legado perfectamente adaptable a la industria del balompié.
De entrada, Jobs creó una empresa duradera, misma que, según él, es mucho más difícil y mucho más importante que crear un buen producto (logro esporádico). ¿Y cómo lo hizo? Éstos son algunos de sus fundamentos...
Uno: Pensó en los productos antes que en los beneficios. Cuando en los 80 diseñó la primer Macintosh, su determinación era lograr algo "absolutamente genial". Nunca habló de maximizar los beneficios entre costos y ganancias (Real Madrid de los Galácticos).
La máquina resultante era muy cara y acabó costándole la destitución de Apple, igual que al presidente del Real Madrid, Florentino Pérez. Pero ambos "dejaron una marca en el universo", como solía decir Jobs. Y a la larga ambos alcanzaron el equilibrio. La motivación era los productos, no los beneficios.
Dos: Trabaja con los mejores y exige la perfección. Porque es la manera de evitar lo que llamaba "proliferación de estúpidos", que se produce cuando los gerentes son tan educados que la gente mediocre se siente cómoda sin hacer nada. Si algo era un asco, se lo decía a la la cara. Cuando cuentas con gente muy buena, no necesitas estar encima de ella.
Tres: Cuando te quedes atrás, da un salto adelante. Mientras todos diseñaban PCs con quemadores de CD para grabar música y en las iMac no se podía, Jobs no se limitó a alcanzar a los demás. Creó la tienda iTunes y el iPod, transformando la industria de la música.
Ahora analicemos: Cuando Tigres y Rayados se alejan de los primeros lugares, ¿qué hacen? ¿Intentan estar a la par de los mejores o diseñan algo superior?
Y, tras el éxito del iPod, el mismo Jobs canibalizó su producto con el iPhone. Lo mismo pretende el América con la baja de Mohamed y la contratación de Darwin, Benedetto y Matosas. Pero en cambio, ¿qué hicieron los Tigres y Rayados cuando fueron campeones? Mantuvieron intacto el producto, pensando que éste prevalecería.
Cuatro: Ignora los "focus groups". Sobre los estudios de mercado, Jobs siempre citaba a Henry Ford: "Si les hubiera preguntado a los clientes qué querían, me habrían contestado: "Un caballo más rápido". Y creo que esto aplica perfectamente hoy con el tema de Carlos Barra. ¿No cree usted?
PD: Quien combina las humanidades con la ciencia, puede diseñar algo extraordinario.
Lo escrito, escrito está.
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