Dentro de la profunda reflexión de autocrítica convocada por el entrenador rayado tan pronto finalizó el juego contra los Correcaminos, en lo personal me gustaría que el mismo Barra incluyera en su meditación todas las preguntas que, desde la tribuna, tienen muy molesta a su afición.
De entrada, tenemos la cuestionable sorpresa que nos dio con Omar Arellano. ¿Por qué si "La Pina" tiene 10
años jugando por la banda derecha, y lleva más de 200 entrenamientos bajo su cargo como auxiliar o entrenador en jefe, le brotó la necesidad de asignarle la función de centro delantero en un partido oficial?
¿En cuántos entrenamientos Arellano brindó un resultado satisfactorio desempeñándose como "9", para calcular que iba a funcionar ahí? Y si faltaba otro centro delantero diferente a Pabón, Madrigal o Lucas Silva (este último a quien también improvisaron como "9" en el torneo pasado), ¿no era más conveniente priorizar la llegada del sustituto de Suazo?
¿Y de Yimmy Chará? Si el colombiano es extremo derecho, ¿por qué inicia de 9 y medio? Y si es 9 y medio, ¿por qué juega antes que Silva o Cardona? Y de tener esa doble cualidad, ¿para qué trajeron a Barrera, si con él amontonan a cuatro aleros derechos?
Pero la lógica sucumbe con el manejo de Cardona. ¿A poco ni su entrenador de selecciones menores, ni el entrenador de la mayor o el del Atlético Nacional, Juan Carlos Osorio, se dieron cuenta de que Cardona, con 184 centímetros de estatura y 80 y pico de kilos, era un punta izquierdo natural? Y de ser así, ¿no es el puesto nato de Neri Cardozo o Cándido Ramírez?
Si a Barra le gusta alternar en diversas posiciones a sus jugadores, me vuelvo a cuestionar: ¿dónde le ha funcionado esa práctica? ¿En qué equipo certificó su teoría? ¿Qué entrenador en el mundo ha triunfado meneando posiciones en el futbol de alto rendimiento? ¿Madrid, el Barsa de Guardiola, Manchester United o el Milán de Arrigo Sacchi?
Ok, recuerdo que Vucetich logró que Walter Ayoví jugara de segundo contención y lateral. Pero hasta ahí. Y además lo hizo cuando los Rayados ya dominaban una idea base.
Y si la playera siempre hay que vestirla con responsabilidad, como bien apuntó Barra, yo sólo quisiera aclarar que la responsabilidad no inicia cuando se ponen la camiseta, sino durante todo el tiempo que no la traen, empezando por los entrenamientos.
Porque al final del día, todo lo que vemos en un juego oficial es producto de lo que hacen y dejan de hacer durante todos los días que hay entre partido y partido. O aparte de Supermán, ¿qué otro se pone el traje con la "S" y se transforma en un súper héroe?
PD: El Monterrey debe ser manejado como si no tuviera un solo jugador plurifuncional. Por el simple hecho de que no lo tiene. ¿No cree usted?
Lo escrito, escrito está.
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