Apenas van los primeros minutos del Clausura 2015 y de los partidos que he visto, con excepción del Monarcas ante Toluca, me han dado motivos para seguir pensando que tendremos una interesante Liga MX.
El equipo que me causó una grata sorpresa por su forma de jugar y ganar con mucha autoridad en una plaza súper complicada como la de Torreón, fue el Veracruz.
De ser éste el nivel que
mostrarán los Tiburones Rojos en este torneo, la lucha por la permanencia en el máximo circuito se pondrá color de hormiga, ya que también el Puebla se vio con un futbol mejor estructurado de lo que mostró en la temporada pasada en su victoria frente a los Xolos de Tijuana.
El América mostró en sus primeros 90 minutos que colectivamente le falta muchísimo trabajo, pero que hay tanta calidad en su plantel que si su juego de conjunto no funciona las individualidades con que cuenta en su zona ofensiva podrán sacar la chamba adelante, exactamente como lo hicieron frente al León.
Pese a que ya no tienen a Gustavo Matosas en su banquillo, los Esmeraldas se mantuvieron fieles a un estilo que les ha dado dos títulos de campeón y mucha alegría a su gente.
Es cierto que perdieron el encuentro, pero dejaron claro que seguirán siendo un equipo atrevido, ofensivo y que le atrae jugar bien a la pelota.
Yo no se hasta dónde llegará el León con Juan Antonio Pizzi como técnico, pero al parecer no perderá su atractivo, y tampoco mi atención.
Hablando un poco de lo que presencié en el Estadio Universitario, los Tigres no mostraron nada distinto, ninguna variante, nada de sorpresa, la misma monotonía futbolística causada por las mismas carencias en su zona de creación.
Pizarro, como siempre; Lugo, muy mal; Carreño, errático fuera del área y sufriendo dentro de ella por la falta de llegadas del equipo; Guerrón, atrevido como siempre, pero poco pudo ayudar y por la buena marca de Castillo perdió la cabeza y fue expulsado.
El partido fue tan aburrido que lo mejor, lo más aplaudido y más espectacular fue un error en un remate de cabeza del joven Castillo o acierto del portero Vilar, como ustedes lo quieran ver, y el gol del Atlas precedido de una buena jugada colectiva.
Todo eso sucedió entre los minutos 75 y 79 del encuentro, los demás minutos fueron un mar de intrascendencia.
¿Creen ustedes que con la falta de variantes y de creatividad mostrada por el equipo de Ferretti el brasileño Rafael Sobis podría haber hecho más de lo que hizo Carreño?
Aun los buenos delanteros dependen de un equipo que los apoye.
Los Tigres pierden y sus problemas siguen siendo los mismos. Con poco otra vez podrán llegar lejos, pero para ser campeones necesitarán mucho más.
@krek9
careca@elnorte.com
