La sangre llama
Los refuerzos extranjeros de Pumas no tardaron ni dos semanas desde su llegada a México en encontrar padrinos y choferes...
Desde su incorporación, el paraguayo Silvio Torales y los uruguayos Jonathan Ramís y Gerardo Alcoba supieron con quién juntarse para integrarse más rápido y de paso evitarse andar tomando taxis.
Torales ha estado muy unido al
capitán Darío Verón, quien sabe hacer migas con sus paisanos, basta recordar cómo apapachó al delantero Robin Ramírez, quien por cierto fue recomendación suya y pasó de noche por CU.
Por lo tanto es común ver al nuevo contención felino estar cerca del central quien tiene el gesto de darle aventón una vez terminadas las prácticas en Ciudad Universitaria.
Caso similar es el de Ramís y Alcoba, quienes al ser charrúas se acoplaron perfectamente a Matías Britos, conciudadano que la ha hecho de "chofer" para sus recién desempacados compañeros.
El único que no tuvo padrino fue Yosgart Gutiérrez, pero ni falta que le hace, pues al llegar de Cruz Azul tiene su carro propio y poco a poco se integra al plantel.
Y ¿dónde fue el juego?
Extrañamente, las redes sociales de las Selecciones Nacionales afirmaron el pasado 27 de diciembre que el Tri Sub 20 jugaría un partido amistoso ante el Puebla en el Centro de Alto Rendimiento al día siguiente, cuando en realidad el partido tuvo lugar a más de tres horas de ahí, en el Estadio Cuauhtémoc de la ciudad de Puebla.
Pero aún más extraño fue que el día del partido, el Puebla se dedicó a informar por esta vía de cada detalle del juego, pero en las cuentas de Twitter, Facebook y LINE de las Selecciones, nada... Ni se retractaron de informar mal la sede y luego ni un comentario del partido... ¿será que los encargados de redes sociales llegaron bien puestos a tuitear el 28 al CAR y lo encontraron vacío?
san.cadilla@reforma.com