San Cadilla
en CANCHA


Pudo ser peor
 
Y en la sección "Mil Maneras de Morir" versión Guadalajara a las ya conocidas "comer hígado encebollado", "circular en bici por donde transita un midibús" o "retirar dinero en efectivo del banco" habrá que agregarle "ir al Estadio Jalisco a un juego del Atlas". Suena a broma, pero tristemente no lo es.

Están a nada de poner en la estadística la primera víctima

mortal por asistir al futbol, y esto quedó de manifiesto el domingo cuando estos descerebrados con camisas rojinegras agredieron a aficionados del Monterrey, primero, y luego a los policías de Guadalajara.

Que no fue la Barra 51, dicen sus defensores, quesque porque no los dejaban salir. Ajá.

Para empezar, no son equipos de futbol que anden numerados. Cientos se quedan afuera del estadio porque no tienen para boletos o van a localidades más baratas.

Pero créanme que los agresores del domingo no eran precisamente chavos de Club Social ¿O a quiénes creen se les podría ocurrir desbaratar los puestos de los vendedores ambulantes para usarlos de armas contra los policías?

Previo a cada juego hay una reunión en la que Ayuntamiento y el Atlas planean el operativo; las autoridades proponen un número de agentes, pero es el club el que debe pagar por ellos.

La cifra "oficial" es de 230 efectivos, pero esa noche, después del zafarrancho, un comandante acusó que sólo eran 110 contra la turba ¿Qué pasa con los demás si como quiera se los cobran a los Zorros? Exacto. Eso que están pensando.

Es el segundo hecho violento en la administración del Grupo Salinas, con la diferencia de que la primera ocasión causó mucha más irritación porque las agresiones se dieron en vivo en cadena nacional.

Ahí sí habrá que reconocer la mano firme que mostró Jorge Vergara, dueño de las Chivas, combatiendo a los rijosos; nada que ver con la tibieza mostrada por la gente de Ricardo Salinas Pliego.

Lamento decirles que, si deciden hacerse de la vista gorda, no pasará mucho para tener una víctima mortal. Espero equivocarme.

 
 
Sigue en 'Chino'
 
En lo futbolístico, ya les había contado lo difícil que se había puesto Rodrigo Millar para renovar su contrato con el Atlas.

Déjenme decirles que va más rápida la Línea 3 del Tren Ligero, así que ya se imaginarán cómo va el asunto.

Si de aquí al jueves no hay arreglo, pueden irse despidiendo del chileno.

Así de claro fue el agente del mediocampista, quien lleva días en la Ciudad, pero ha encontrado diferencias en la la duración del contrato del "Chino".

El chileno en un principio buscaba cuatro años más, hoy se conforma con tres, pero la directiva sólo quiere firmarlo por dos.

Millar, a sus 33 años, tiene por lo menos otras dos ofertas nacionales, aunque para poder irse -gracias al Pacto de Caballeros- tendría que recibir algo el Atlas.

Por otra parte, Lucas Pratto, de 26 años y del Vélez Sarsfield, es una de las principales opciones para reforzar el ataque y ya entraron en contacto con el jugador, quien les dijo que sí viene.

Sin embargo, no es el único al que gestionan, pues también tienen en la mira a un ariete paraguayo que juega en España.

Por cierto, dicen que "piensa mal y acertarás", pero el director deportivo Heriberto Ramón Morales estará hoy en Paraguay para el sorteo de la Copa Libertadores 2015, en el que, curiosamente, le harán un homenaje a Gustavo Matosas.

¿Aprovechará para hablar con él? Es pregunta.

 
 
Notihachazos
 
Con la novedad de que Sergio Bueno fue ratificado como técnico de los Jaguares de Chiapas, el llamado "equipo milagro"... sí, porque es un milagro que les paguen a tiempo y jueguen bien, luego de haber sido armados con saldos de última hora en el Draft.

Al que de plano le dieron las gracias fue a José Guadalupe Cruz, quien desde el viernes había sido avisado que no continuaría como técnico del Morelia. No sé si como castigo o consolación, pero ¿cómo verían ahí un tercer regreso del "Jefe"?

 
 
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