San Cadilla
en CANCHA


Los quiero ver...

Bonito ejemplo el que dieron el fin de semana los directivos de Santos y Pachuca, la situación que ya ha sido muy comentada del agarrón en la zona de vestidores cuando Andrés Fassi le reclamó al árbitro Fernando Guerrero y luego llegó Alejandro Irarragorri a querer arreglar el asunto, con resultados contraproducentes, pero en lo que no se ha reparado es que tanto Fassi

como Irarragorri son integrantes y asiduos asistentes al Comité de Desarrollo Deportivo de la Liga MX.

Se supone que de estos dos señores y de otros más que por ahí se dan cita salen los proyectos para el futbol mexicano y, sobre todo, para su desarrollo, pero con lo que pasó el otro día ya uno se puede imaginar cómo es el momento de la lluvia de ideas en el Comité.

Justo los directivos que tendrían que enarbolar la bandera del desarrollo, como que se fueron más a la involución que a la evolución.

Pero lo que más curiosidad me da es saber cómo rayos se van a llevar en la próxima junta del Comité, cuando tengan que sentarse a la misma mesa con sus propuestas para mejorar una Liga, que vaya que necesita que la mejoren, si en la "vida real" lo único que hacen es empeorarla con estas escenitas.

 
 
Casco resuelto
 
Como si mis amigos que patrocinan el equipamiento de los Pumas me hubieran escuchado, aprovecharon a las mil maravillas la jornada en que el arquero Alejandro Palacios estuvo fuera de circulación por su expulsión ante Santos de la Fecha 15 para chambear en conseguirle un casco que le protegiera la cabeza, que le fue sacudida de manera violenta a inicios de octubre por su carnal, Marco.

Si no mal recuerdan, después del golpazo que sufrió en Puebla, el "Pikolín" portero salió con una protección igualita a la del checo Petr Cech, con todo y el logote de adidas en la frente, lo que seguramente a Nike no le agradó ni tantito y por lo cual supongo que los utileros del club pintaron de negro la marca del casco en Torreón para no hacer publicidad al máximo competidor del proveedor felino.

Afortunadamente para la marca (y se me hace que también para el club), el "Piko" vio la roja y no jugó ante Veracruz, pero el sábado, en su nuevo regreso en el Estadio Azul ante La Máquina, ya lució una protección no sólo con una palomita en la frente, sino con una palomita en la frente y dos más en las sienes, como para dejar en claro quién paga por vestir a los auriazules, ahora sí, de los pies hasta la cabeza.

 
 
Temor ¿infundado?

Ahora que el "Chatón" Enríquez quedó fuera de combate por una fractura en un dedito, hay quienes temen en el Guadalajara que el defensa se dedique durante su rehabilitación a "buscar" su bienestar por toda La Perla Tapatía, gritando "¡Salud!" por aquí, "¡Salud!" por allá...

 
san.cadilla@reforma.com