Oxígeno para Jerry

Fernando Von Rossum
en CANCHA


Amables aficionados: hay que apagar las antorchas, dejar de lado las horquetas y garrotes, quitar las cadenas y abrir el calabozo, ya que el anunciado linchamiento del señor Jerry Jones ha quedado pospuesto indefinidamente.

En un año en que se esperaba que el equipo de Dallas proseguiría su marcha mediocre e incluso tuviera una regresión mayor, después de seis fechas de la temporada son el

conjunto sorpresa que el domingo regresó a su casa después de asestarle a la corona de los actuales campeones una abolladura mayor. Porque no nos engañemos con el apretado marcador. Los Vaqueros zarandearon rotundamente a Seattle, dominándolos a lo largo de las estadísticas al tiempo que silenciaban al ruidoso público que tanto afecta a los visitantes. Si no fuera por los errores de los equipos especiales, que regalaron 14 puntos, el resultado final hubiera tenido el tufo de paliza.

Reitero las razones para el ascenso del conjunto texano. Mientras las deficiencias recientes enfocaban los reflectores sobre Jones magnificando las frustraciones de los seguidores Vaqueros, el equipo administrativo y los buscadores armaban calladamente al equipo, iniciando por donde se debe y nunca se alumbra: las líneas.

Con tres recientes selecciones colegiales anclando la línea ofensiva, Dallas ha encontrado el camino tanto abriendo los huecos para dominar por tierra con DeMarco Murray, como protegiendo a Tony Romo dándole el tiempo suficiente para lanzar el balón, sin forzarlo, evitando los errores que tanto le costaron críticas y derrotas en tiempos recientes. Y ahora se puede apoyar tanto en Dez Bryant como en Terrance Williams, un par de receptores abiertos que le dan problemas a cualquier defensa.

Hablando de ésta última, también ha jugado muy por encima de las proyecciones del verano. Los esquemas del coordinador defensivo Rod Marinelli le han funcionado de maravilla y ha integrado una defensa que maniató a Seattle en solo nueve primeros y diez e hizo ver a Russell Wilson como lo que es realmente, un mariscal todavía inexperto que tiene éxito cuando el resto de su equipo lo coloca en posiciones favorables. En fin, una excelente actuación de Dallas que lo coloca como el mejor actualmente en la NFC.

Finalmente, mis MEJORES DIEZ: 1.- Dallas (5-1), 2.- San Diego (5-1), 3.- Denver (4-1), 4.- Filadelfia (5-1), 5.- Arizona (4-1), 6.- Baltimore (4-2), 7.- Seattle (3-2), 9.- San Francisco (4-2), y 10. Nueva Inglaterra (4-2). Por ahora, hacemos una pausa...

 
 
fvonrossum@reforma.com