Esperé noticias sobre el estado de salud de Jules Bianchi, quien se accidentó al chocar contra la grúa que retiraba el averiado Sauber de Adrian Sutil.
Lo único que sabíamos es que estaba siendo operado por heridas muy severas en la cabeza.
Más tarde vi algunas imágenes que no pasaron en la TV, las cuales me provocaron escalofrío y me prepararon para la peor noticia. Esperemos que
esté equivocado.
El tema de conversación en Suzuka desde el viernes era la inminente llegada del tifón Phanfone, pero la F1 ya tenía su dos tifones: Vettel y Alonso.
El español anunció que dejará a Ferrari y Vettel que se va de Red Bull.
El tetracampeón alemán no ha dicho dónde continuará su carrera, aunque es casi obvio que se irá a Ferrari con uno de los mejores contratos nunca vistos en F1, ¡aunque también podría sorprender a todos e irse a McLaren!
Red Bull aprovechó la oportunidad y anunció a su protegido piloto de Toro Rosso, Daniil Kvyat, como sustituto de Vettel, sin dar pie a especulaciones sobre la posible llegada de Alonso.
Ferrari perdió la oportunidad de emitir una comunicación oficial y se llenó la cara de espagueti.
Es triste ver cómo cambia todo en Ferrari, el nombre más ilustre en el deporte. En menos de un año han reemplazado a todos sus directivos y acaban de perder al mejor piloto, Alonso, cuyo futuro es una incógnita.
Sin duda un final muy triste para un Gran Premio de Japón, que no fue la primera vez se corrió en el agua.
Seguramente muchos de nosotros casi apagamos la TV cuando Fernando Alonso se quedó parado en la primera vuelta por una falla eléctrica, robándonos de un buen espectáculo.
No pude creer la gran cantidad de vueltas en que nuestro Charlie Witting dejó el Safety Car en pista. ¡Los coches casi terminan con sus intermedias detrás de Bernd Maylander!
Una pena que Jenson Button no pudiera conservar su tercer puesto, resultado de una buena estrategia de parar primero por intermedias.
Nos sorprendieron el tremendo rendimiento de los Red Bull en el agua, y nuestros mexicanos, que estuvieron ambos en la zona puntos, pero al final sólo "Checo" pudo conseguir un punto muy peleado.
Con el doble accidente de Sutil y Bianchi, la carrera fue detenida en la vuelta 44.
Se harán muchas preguntas, como ¿por qué no salió el Safety Car inmediatamente después del accidente de Sutil cuando una grúa se apareció en la pista para retirar el auto? Y no necesariamente habrá respuestas.
Nuestros pensamientos están enfocados en Jules Bianchi, quien ahora está disputando la carrera más importante de su vida.
jo.ramirez@reforma.com