No podemos hablar en positivo después de lo que le pasó a Sultanes contra Diablos en la Final de la Zona Norte.
Simplemente por lo que vimos, oímos y leímos, esto es lo que fue Sultanes durante toda la temporada, empezando desde la pobre demostración de pitcheo zurdo, en la que se salvaron Ramón García y Marco Tovar.
Tendremos que seguir con varios de los relevistas intermedios y
otros que quisieron convertir en abridores (Solano, Adrián Garza, César Carrillo, el novato Pepe Sánchez y Nicolás Heredia), que por cierto lo relegaron al final, no sabemos por qué.
A los cerradores desgraciadamente les faltó. A pesar de su gran experiencia se equivocaron frecuentemente en momentos clave, sin idea y faltos de control, salvo contadas excepciones.
Hassan Pena, Óscar Villarreal y hasta Jonathan Arias cayeron en ese grupo, a pesar de tener en la bola, pero repetimos: se descuidaron mucho y les faltó concentración.
Analizando la campaña fríamente, hubo gente importante que tuvo un buen verano, como Agustín Murillo, Luis Alfonso García, Chris Roberson y Ramón Ríos, por mencionar algunos.
¿CUÁNTAS CACHUCHAS SOBRARÁN?
Como ya dijo Pepe Maiz, y ojalá ahora sí sea cierto, ¿cuántas cachuchas van a sobrar?
En nuestra opinión, habrá que pensar qué hacer con Adán Muñoz, Humberto Cota, Édgar Quintero, Ricky Álvarez y dos o tres más.
Anticipamos que habrá problemas en este asunto: no dudamos que haya clubes que se interesen en algunos de ellos, pero cuando se enteren de lo que ganan muchos se olvidarán del asunto, a menos que les bajen el sueldo. O sea que no va a ser fácil.
En cuanto a refuerzos, pensamos que Ramón García, Chris Roberson y quizá Jonathan Arias deberían repetir, a reserva de lo que pase en invierno.
O sea que el licenciado Magdaleno va a tener un invierno muy ocupado.
felipem@elnorte.com