La primera gira del Tri
En cuanto se ratifiqué de manera oficial la continuidad de Miguel Herrera al frente del Tricolor, el nuevo proceso iniciará con un par de partidos fuera del País de la manera más apantalladora posible, para hacerlo con el pie derecho y que no decaiga el ánimo tras quedar fuera -¡oootra vez!- en los Octavos de Final del Mundial, tal y como ha sucedido en los
últimos 6 intentos de hacer historia.
Circulan versiones de una revancha ante Holanda en Amsterdam, para abrir boca, durante una gira programada para septiembre. Como será una Fecha FIFA doble, de ahí el Tri se iría a jugar contra Bielorrusia en la ciudad de Minsk.
Al parecer, la Selección quiere empezar de una manera diferente su ciclo mundialista.
Ya ven que el anterior proceso inició con la tristemente célebre gira por las ciudades de Guadalajara y Monterrey que terminó con la fiestecita que originó tanto caos, castigos y a la postre la deserción de Carlos Vela.
Esperemos que ahora los jugadores superen las tentaciones de las holandesas y bielorrusas, y no haya nada que lamentar después. Al menos a ellas no les van a entender mucho y así serán menos los riesgos, siempre y cuando a alguno no se le aparezca una Yamillé bielorrusa.
Cuartel de 10
Me comentan que Argentina aplicó una medida muy inteligente a la hora de decidir dónde colocar su cuartel general en el Mundial de Brasil.
Resulta que la albiceleste se fue a meter a un municipio muy cercano a Belo Horizonte que se llama Vespaciano, que está muuuy lejos de la ciudad, en plena carretera entre el aeropuerto y la parte urbana de Belo, así que no cualquiera puede llegar.
Hay que arribar a fuerza en vehículo y aun así no se puede uno acercar si no se identifica como miembro de la delegación o de la prensa ante un retén a unos 100 metros antes del portón del lugar de concentración. De cruzarlo, todavía hay un largo trecho kilométrico para acercarse hasta donde entrena y duerme el equipo.
Ahí los jugadores formaron su búnker con mantas de apoyo. Incluso se colocó sobre una pared una foto inmensa de la reunión que tuvo el equipo con el Papa Francisco.
Pero lo mejor viene en que, a pesar de estar en una de las ciudades que tienen su aeropuerto más lejos, Argentina se quedó a unos cuantos kilómetros y como Belo está en la zona central del país, no ha tenido problemas en las distancia aéreas a las ciudades de sus partidos, a diferencia de... bueno, de otros equipos que tenían que recorrer enormes tramos en avión y luego todavía en autobús para llegar a sus hoteles (conste que no dije México, ¿eh? No lo dije).
Así que esa planeación, lejos de la gente y cerca del aeropuerto, al menos ya le alcanzó a los chés para las Semifinales.
san.cadilla@reforma.com