Cabeza de turco

Francisco Javier González
en CANCHA


La capacidad del ser humano para acostumbrarse a lo bueno es sorprendente.

Como si fuéramos agua bendita, nos acomodamos a cualquier recipiente y tomamos su forma cuando es para algo placentero, positivo, confortable.

Y hay otro don que poseemos: cuando se logra algo que rebasa las expectativas, que sacia el hambre largamente sufrida, ya no queremos regresar al estatus original.

Nos puede irritar perder las prerrogativas.

Las críticas hacia Antonio Mohamed porque su equipo no se parece al de Miguel Herrera son de lo más injusto.

Como el actual técnico de la Selección Nacional hizo campeón al América, su juego fue básicamente espectacular y además protagonizó una Final de antología, lo que se le pide al siguiente es una copia al carbón de lo mismo.

No hay un solo equipo que cambie de técnico y las cosas sigan sucediendo como si nada. Ni tampoco es común que un plantel juegue igual siempre: los futbolistas no son máquinas y acusan desgaste físico, lesiones, bajas de juego y en el caso del América, hasta suspensiones inocentes.

Es un hecho que Mohamed no es Herrera, aunque en algunos rasgos de personalidad tengan semejanzas.

Se pintaban el cabello en Toros Neza, son charlistas muy interesantes y tienen mentalidad ganadora. Pero no dirigen igual. Cada quien tiene su librito.

En las Águilas han sucedido varias cosas: en diferentes momentos se lesionaron Osvaldo Martínez, Raúl Alonso Jiménez y Luis Gabriel Rey.

Rubens Sambueza fue suspendido dos partidos, los desem-peños individuales de varios jugadores no son los mismos que el semestre pasado -físicamente le está costando trabajo al América mantener la dinámica- y Mohamed empieza a enojarse con algunas preguntas en las conferencias de prensa.

En Coapa todo se magnifica por la naturaleza del club de que se trata. Dato conocido.

Dos derrotas al hilo parecen seis y dos partidos sin gol, una causa perdida.

El nuevo técnico necesita tiempo para poner en práctica sus ideas, hacer sentir su mano y encontrar su propia manera de hacer las cosas; no copiando las de su antecesor.

Que enfrente a Pumas en su siguiente partido ofrece un ángulo adicional: además de tener que salir del bache, lo tiene que hacer en un Clásico que parece asequible por cierto.

Antonio Mohamed es un buen técnico. Aunque sea difícil desa-costumbrarse a lo bueno, injusto es olvidar quien es el "Turco" y lo que ha logrado.

Ni Roma, ni el nuevo proyecto de Coapa se hacen en un día.
 
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