¿En qué momento nos convencieron de que en el Clásico Regiomontano antes de ganarlo importa más no perderlo?
En apego al instinto de supervivencia, los actores, al equiparar las consecuencias, paulatinamente trasladaron a primer plano lo que sólo le corresponde a la victoria.
Si clasificamos algunos de los daños colaterales que se han suscitado en nuestro "Best Seller", de entrada
subrayamos el primer cese de Ricardo Ferretti en Tigres, mismo que se dio con la complacencia de toda su afición por aquel humillante resultado del Clásico 71.
Al pintoresco Miguel "Piojo" Herrera, también de manera unánime, los Rayados le aplicaron la puntilla un partido después de fracasar en la edición 85.
Y hasta al mismísimo Víctor Manuel Vucetich, pero sin la aprobación de la mayoría, la secuela de perder el Clásico 100 sólo le alcanzó para sostenerse dos jornadas más.
Y ahora que ni el "Profe" Cruz ni mucho menos el "Tuca" llegan al Clásico 102 resguardados por el blindaje de los resultados, de darse un ganador, las posibilidades de que el vencido renuncie o que a éste lo destituyan no las podemos dejar fuera de lo posible.
En medio de este contexto, la escena antes del partido es la siguiente:
El factor estadio favorece al Monterrey.
Los Rayados arriban con un par de gramos de confianza por arriba de Tigres.
Los Tigres alinearán jugadores con más Clásicos jugados.
Igual condición en la zona técnica.
En jugadores de recambio, los Tigres con Burbano, Torres, Pacheco y Lugo, medianamente superan a Morelo, Cándido, Juárez y Arellano.
En la portería, los Rayados muestran una muy clara superioridad.
En el delantero centro, Pulido ya ha marcado diferencia en este tipo de partidos.
Ante la posible ausencia del "Chelito", al Monterrey sólo le queda la figura de Neri Cardozo para competir con Lucas Lobos.
Con la vergüenza de haber sido y el dolor de ya no ser, sólo el aficionado que tiene la virtud de anteponer el corazón a los datos señalaría un favorito.
Mientras tanto, difícil será ver un gran espectáculo, cuando ambos equipos se preparan para no tener grandes riesgos. ¿No cree usted?
Paradójicamente, en el mundillo de los rumores, dicen que Vucetich, por estrategia, se cotizó con el Morelia como si fuera la Selección, en espera de un posible llamado en Tigres. ¿No cree usted?
PD. "Cuantas cosas perdemos por miedo a perder". Paulo Coelho.
Lo escrito, escrito está.
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