Revisen la historia de Pumas

COLABORADOR INVITADO / Roberto Vargas
en CANCHA


Es pertinente recordar que el pasado 11 de abril se cumplieron 113 años del nacimiento de Renato Cesarini, un hombre que, por su filosofía de vida y de trabajo, sentó las bases de lo que por años fue un club ejemplar: Universidad Nacional.

Pumas tiene escasas posibilidades de clasificarse a la Liguilla, de la cual fue echado por goleada, en sus dos recientes apariciones, por su acérrimo

rival: América.

Mientras el cuadro de Coapa suma títulos, Universidad arrastra su prestigio. Qué lejos quedaron aquellos tiempos en los que Panchito Hernández, el mítico directivo azulcrema, iba a Ciudad Universitaria a ver las prácticas de Cesarini con Pumas, para "copiar" lo mejor del técnico italo-argentino.

Acostumbrado a la alta exigencia del Calcio, donde llevó al bicampeonato a la Juventus entre 1959 y 1961, Cesarini llegó a México para comenzar la profesionalización de un club semi amateur recién ascendido a Primera. Trabajo, disciplina y respeto por el oficio de jugador, fueron algunas de las cosas por las que sus discípulos recuerdan a Don Renato, un maestro de vida, antes que del balompié.

En momentos en los que Pumas ha perdido el rumbo, ¿no sería bueno que Ares de Parga y Marioni le echaran un vistazo a los que ha sido la historia de Universidad? No sólo al legado de Cesarini, también de los ingenieros Gilberto Borja y Guillermo Aguilar Álvarez, forjadores de la grandeza que algún día presumió este equipo.

 
Twitter: @RS_Vargas