Con el "Ángel de la Guarda" que siempre acompaña a Vucetich, nuestra Selección mejoró sus opciones de disputar el Mundial 2014 en un agónico partido frente a unos panameños que, como Honduras, Costa Rica, Jamaica y Estados Unidos, sin complejos nos hicieron sudar la gota gorda en el mismísimo Estadio Azteca.
El golazo de Raúl Jiménez a cinco minutos del final -producto de una pésima
recepción, pero sellado con sublime sincronía corporal- sirvió para que el salvamento del debutante entrenador arrancara con victoria.
Alrededor de este gol que ya calificamos como el más bello en la historia de nuestra Selección, también hay que sacar a relucir el siguiente acertijo:
Teniendo a Aldo De Nigris, Lucas Lobos y al joven Jiménez disponibles para entrar a la cancha en un partido al que le restaban minutos para quedar prácticamente fuera del Mundial, ¿qué orilló a Víctor Manuel Vucetich a optar por el cambio que estadísticamente era menos probable?
Si de algo sirve el apunte, les recuerdo que Vucetich es de misa diaria. Y como dice el dicho: "Suerte es la palabra que usa Dios cuando quiere permanecer anónimo".
Por otro lado, tuvieron que pasar siete años, 10 partidos eliminatorios rumbo al 2010, cuatro encuentros mundialistas en Sudáfrica, tres de la última Confederaciones y ocho de este Hexagonal, para percatarnos que la supuesta internacionalización de jugadores como Salcido, el "Maza", Guardado, Moreno, Ochoa, Gio, "Chicharito", Aquino, Juárez, Barrera y hasta el bipolar de Carlos Vela, lejos de mejorarles el nivel, apenas y ha servido para que los clasifiquen, cataloguen y etiqueten a nivel mundial.
De cara al último partido del Hexagonal, la Selección Mexicana sólo necesita de un empate en San José ante Costa Rica para amarar la Repesca contra Nueva Zelanda.
Pero si en el Independence Park de Kingston se da un milagro de esos que sólo se le conceden a los fervientes devotos como Vucetich, y Honduras pierde contra Jamaica -equipo que ya está más muerto que Pancho Villa- México ganando por dos goles o más obtendría el pase directo a Brasil con tintes celestiales.
La Selección Mexicana quedaría fuera de toda posibilidad si pierde en San José y Panamá derrota a Estados Unidos.
Como dato curioso, hay que dejar muy claro que la tristísima debacle por la que atraviesa la actual Selección, única y exclusivamente se ha reflejado en los partidos en el Azteca, donde con apuros sólo vencimos a Panamá, empatamos con Jamaica, Estados Unidos y Costa Rica y, con toda legalidad, perdimos frente a Honduras.
Pero de visitante, aunque usted no lo crea, México es la única Selección en toda esta eliminatoria que ha sumado cinco puntos o más.
Y si la historia dice que desde 1957 han sido 16 las ocasiones en que el conjunto azteca ha jugado en suelo tico, de las cuales se han rescatado siete victorias (cuatro de éstas por dos goles o más), cinco empates y sólo cuatro derrotas, las posibilidades de sacar algo positivo contra unos costarricenses calificados, junto al amparo del "Ángel de la Guarda" de Vucetich, siguen siendo muy altas. ¿No cree usted?
PD: "Suerte es cuando la preparación y la oportunidad se encuentran y fusionan". Voltaire
Lo escrito, escrito está.
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