"Si tuviera que escoger entre mi esposa y mi putt, de verdad la extrañaría...".
Profesional de Golf
Con el regreso a clases de millones de jóvenes hace dos semanas, también se pusieron en marcha los torneos infantiles-juveniles de algunas asociaciones regionales en el País, claro que a los torneos de golf no llegan ni a mil competidores, pero es una cantidad buena y
muy valiosa.
En la organización del golf en el País existen seis asociaciones regionales federadas que se encargan de impulsar el golf competitivo en su área de control y lo hacen con una Gira de unos 6-7 torneos entre septiembre y marzo. También los hacen con el fin de formar los equipos con los que competirán en el Torneo Nacional Interzonas.
Esos certámenes son, para algunos, una forma de educación, pues los padres llevan a los pequeños como forma de iniciación a las disciplinas del deporte. Otros los llevan un poco a la fuerza, porque es el deporte de los padres. También hay un grupo selecto de pequeños que de ahí les nace el gusto por las competencias y se siguen hasta donde les alcance la energía para lograr sus sueños.
Para los pequeños sin aspiraciones a ser competitivos dentro del deporte siempre estará el beneficio de aprenderlo a temprana edad, cuando es más fácil desarrollar un swing de golf para pegar a la bola.
Para los que se quedan en la parte competitiva los beneficios son mayores, pus no sólo aprenden a jugar, sino a desarrollar una disciplina al trabajo duro que se requiere para alcanzar el nivel deseado.
El golf es un deporte complicado. Para hacerse bien requiere muchas horas de entrenamiento y constancia, y mejor aún, es que los mexicanos con estas intenciones han descubierto que llegar a un programa colegial, donde se puede impulsar el golf al máximo nivel antes del profesionalismo y hacer simultáneamente una carrera académica, no es algo inalcanzable y la inversión en tiempo, dinero y esfuerzo bien vale la pena, pues la recompensa es doble; se abre la puerta al profesionalismo y se tiene lograda una carrera académica, los jugadores que llegan a este punto tienen la oportunidad de decidir entre uno de dos rumbos a seguir, pero mucho mejor preparados para lo competitivo de la vida, porque el proceso de aprender un deporte a nivel bueno es, per se, una carrera misma.
Sea la razón por la que sea, que los competidores vayan a esos torneos se están haciendo una labor silenciosa y fabulosa para el crecimiento del golf en México. Quienes van a las giras regionales es un ganar-ganar, tanto para los padres, como para los pequeños que apenas están descubriendo los beneficios de aprender a dominar los bastones de golf.
Hasta el próximo green.
rafaelalarcongolf@gmail.com
Twitter:@ralarcon2009
