Amables aficionados: es indudable que el énfasis de la NFL en los últimos años ha sido la reducción de lesiones. Por eso aceptaron las cláusulas en el nuevo Contrato Colectivo que redujeron significativamente el número, duración e intensidad de las sesiones de práctica, dentro y fuera de temporada, además de limitar los entrenamientos con golpeo a una vez por semana en temporada
regular.
Adicionalmente se penalizan ahora los golpes a la zona de la cabeza, se prohíbe el uso del casco como arma de golpeo en campo abierto, se controlan firmemente las conmociones cerebrales observando los protocolos para que los afectados puedan regresar a la acción, y se castigan los golpes contra jugadores considerados "indefensos".
Muchos intentos por hacer más seguro lo que es intrínsecamente un deporte rudo y peligroso.
Y, ¿cuál ha sido el resultado de tantos cambios en la forma de jugar? Que los jugadores en la lista de reserva de lesionados, aquellos que en su casi totalidad no regresarán a jugar en esta temporada, es casi el doble, 172 contra 99 de hace un año por estas fechas.
¿Que pasó? Obviamente que esto requerirá de estudios para discernir las causas.
Hay un dato interesante: el número de conmocionados y lesionados de rodilla se ha mantenido estable. Lo que se ha disparado son las afecciones en el pie, llámese daños a alguno de los dedos, desgarres del Talón de Aquiles, Lisfranc, esguinces y torceduras del tobillo, fascitis plantar y fracturas de algunos de los múltiples huesos del pie.
Hay algunas teorías tempranas sobre las causas, entre ellas que muchos jugadores, en aras de la comodidad y menor peso, utilizan zapatos que no les dan la protección requerida. Se habla además de los diferentes tipos de piso en donde se juega: pasto natural, superficie artificial, y la mezcla de ambos en algunas sedes. Esto causa mucha presión por los diferentes tipos de tacos que hay que usar, esos pequeños cilindros en la parte inferior que sirven para obtener la tracción requerida.
Sea cual fuere, éste es un asunto que pronto se investigará a fondo.
No hay que olvidar que a los elementos fuera de acción se les sigue cubriendo su salario, además del costo que significa pagar a los sustitutos. No hay nómina que aguante por mucho tiempo esta doble erogación.
Por ahora, hacemos una pausa...
fvonrossum@elnorte.com