Son varios los equipos que en el actual torneo están muy lejos de jugar de acuerdo a su propia historia.
El Cruz Azul, los Tigres y el Monterrey navegan en la mediocridad, las Chivas trotan por abajo de ella sin saber a dónde, el Atlas vuelve a meterse en la problemática de la lucha por la permanencia que tanto parece gustarle, y los Pumas se empeñan en ofrecer la peor campaña
posible.
Mientras esos equipos arrastran en mayor o menor medida su prestigio y la cobija, otros como el Morelia, el León, el Santos-Laguna, el Querétaro, el Toluca y los Jaguares asumen el papel de protagonistas, y el encarrerado América se ve ampliamente dispuesto a defender su condición de campeón como nadie más lo haya hecho en los torneos cortos.
Si entre los que han decepcionado tuviéramos que elegir a los dos primeros, sin dudar nos inclinaríamos por las desnutridas Chivas y los decadentes Pumas.
Porque tanto el Cruz Azul como los Tigres y el Monterrey todavía tienen con qué para salir adelante en este torneo, y porque en el caso del Atlas de cualquier forma estar abajo es parte de su lamentable normalidad.
En cambio, por más que el Guadalajara ha ligado varios fracasos y los Pumas dos o tres, lo que ambos están haciendo en el actual torneo adquiere tintes francamente vergonzosos.
Si salir hoy del sótano se ve altamente improbable para los Pumas, que visitan al Monterrey, para las Chivas enfrentar al Atlas en esta devaluada edición del Clásico Tapatío se presenta como una magnífica oportunidad para aligerar sus males.
A pesar de ser un partido en el que a final de cuentas no se definirá quién es mejor sino cuál de los dos es menos malo, sobre todo para el Guadalajara resulta urgente ganarlo.
Porque el Atlas parece sentirse muy a gusto abajo, pero a las Chivas lo que les corresponde es intentar recuperar poco a poco esa grandeza demasiado maltratada, impunemente, en los últimos tiempos.
O ni tan impunemente, porque el principal castigo ha sido el franco deterioro de su antaño incomparable poder de convocatoria.
twitter/rgomezjunco
gomezjunco@reforma.com