Ser el heredero de Iker Casillas en la portería de España no es poca cosa ni tarea fácil, aunque sea un enorme orgullo, en este caso, para David de Gea.
España llega a esta Copa del Mundo en medio de una crisis en torneos importantes, más allá de la destitución de Lopetegui: recuperar el camino perdido tras la terrible exhibición mostrada en Brasil: tres partidos jugados, dos perdidos con
Casillas (5-1 vs Holanda y 2-0 vs Chile) y uno ganado, no con De Gea, sino con Pepe Reina en la portería (3-0 a Australia).
Iker completó 17 partidos en 4 Copas del Mundo, con un par de actuaciones muy flojas en 2014 (centro que se techa en gol de De Vrij, balón que le roba de los pies Van Persie y rechace al centro en un tiro libre que termina con anotación de Aránguiz). Para el encuentro ante Australia, Vicente Del Bosque decidió enviarlo a la banca. Su despedida de estos escenarios no fue la ideal, pero su legado permanece como un ejemplo y una meta muy difícil de superar.
Luego de permanecer 3 Copas del Mundo en la banca, y tras colgar el cero en el encuentro ante Australia en el 2014, podría pensarse que Reina sería el sucesor del hoy portero del Porto. Sin embargo, ya para la Euro 2016 y aún con Del Bosque, De Gea se instaló como arquero titular, aunque la Selección española se despidió muy temprano, tras perder contra Italia en Octavos de Final. Lopetegui debutó con España como técnico tras la Euro, en septiembre de 2016. A partir de ahí, y durante toda la Eliminatoria Mundialista (salvo el último partido en Israel, ya clasificados), De Gea fue el designado para cubrir el arco español (Reina siempre detrás).
Ahora, por primera vez desde Corea/Japón 2002, aparece un nuevo arquero como titular designado para el inicio de una Copa del Mundo, que no sea Casillas. Para su mala fortuna, el elegido tuvo una falla muy considerable que fue al marcador y, aunque España no perdió (y de hecho a punto estuvo de obtener la victoria), de inmediato aparecieron las críticas y burlas para el portero español.
Cabe recordar que este gran arquero a punto estuvo de ser traspasado al Real Madrid, pero un trámite extemporáneo en el 2015 impidió su llegada. Aún se dice que existe interés y mucho más ahora que Lopetegui es el técnico del tricampeón europeo. El partido no fue nada atinado para fallar como arquero, por todas las suspicacias, y menos si el disparo que se le escapó fue del máximo referente merengue: Cristiano Ronaldo.
El Mundial de De Gea se pone aún más interesante: contra Irán y Marruecos deberá mantener inmaculada su meta e impecable su participación, para después (ya sea contra Rusia, Uruguay, Arabia Saudita o Egipto) continuar demostrando que es un acertado heredero de Casillas en la portería mundialista. No sólo eso, sino que este inicio, tal como fue su flojo comienzo en Manchester, es simplemente la confirmación de que los errores existen, pero también se dejan atrás de inmediato, cuando se es uno de los mejores arqueros del mundo como De Gea.
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