Rutas alternas

José Pablo Coello
en CANCHA


Las Águilas ganaron el Super Bowl LII gracias a la suma de varios factores fundamentales. Sin embargo, quizás no haya habido uno más importante que la forma agresiva en la que invirtieron para fortalecer la posición más importante en el campo de juego. Carson Wentz llegó a la organización a cambio de cuatro selecciones colegiales que le permitieron a Filadelfia tomarlo como el segundo jugador en

el draft de 2016. Mientras tanto, Nick Foles recibió un contrato multianual por varios millones de dólares aun cuando Chase Daniel ya le estaba costando una cantidad considerable al equipo. Al final del camino, tanto Wentz como Foles aportaron elementos indispensables para que la escuadra al mando de Doug Pederson conquistara el título de la NFL, confirmando la trascendencia de tener un rendimiento por encima del promedio de quien juegue en dicha posición.

En los últimos días, los dos equipos que cayeron en los Juegos de Campeonato de Conferencia, han tomado decisiones contrastantes con respecto a su mariscal del campo del futuro. Los Jaguares de Jacksonville, que al inicio de la campaña anterior parecían estar condenados a la mediocridad mientras Blake Bortles fuera titular, decidieron apostar por la continuidad del egresado de UCF con una extensión por tres años y hasta 54 millones de dólares. Y aunque no se descarta que puedan buscar una alternativa vía el draft, está claro que el plan de Tom Coughlin es mantener a Bortles al frente de la ofensiva y reforzar al equipo buscando dar ese pequeño paso que les faltó para llegar al Super Bowl sin modificar radicalmente la química del vestidor.

Mientras tanto, los Vikingos parecen no estar dispuestos a darle a Case Keenum la etiqueta de jugador franquicia. Y aunque no se descarta que cambien de opinión en las próximas horas o que incluso puedan llegar a un acuerdo con Keenum para que se mantenga en la organización, todo parece indicar que el mariscal de campo que los llevó a la antesala del Super Bowl, se convertirá en agente libre. Es cierto que aún en esa instancia, Minnesota podría encontrar la forma de firmarlo a largo plazo, pero es un hecho que una vez probando su valor en el mercado, las posibilidades de que Keenum se quede en Minneapolis se habrán reducido drásticamente.

Lo cierto es que ni Bortles ni Keenum son jugadores de élite. Y mientras los Jaguares han optado por una estrategia conservadora, dejando pasar la opción de encontrar una mejor alternativa en la agencia libre o en el draft, los Vikingos parecen tener una menor aversión al riesgo y han decidido apostar fuerte para buscar una opción que mejore radicalmente sus opciones de ganar su primer título de Super Bowl.

 
 
Twitter: @JosePabloCoello
jpcoello@gmail.com