Bipolaridad

José Ramón Fernández
en CANCHA


Señoras y señores, cómo cambian las cosas en el futbol. Hace poco elogiábamos la exactitud y efectividad de la defensa de los Pumas: Quintana, Arribas y Van Rankin se entendían perfectamente.

Hoy, en dos partidos ha perdido mucho de lo que había conquistado y Patiño debe saberlo.

Pierde en casa el invicto, frente al Veracruz, que en un par de minutos le hace dos goles. Es difícil el

Veracruz, colero de la tabla de cocientes, y Memo Vázquez, dígase lo que se diga, está haciendo un buen trabajo.

Los Pumas van a Tijuana y marcan primero -con un golazo de Castillo-, pero no soportan la presión; Arribas comete dos errores gravísimos, deja la pelota en los pies del rival, contragolpe y goles: 4-1, así de fácil.

¿Es la bipolaridad del futbol mexicano? Sí, un día juegan bien; otro día, regular, y otro, mal. Una consistencia solamente la ha mantenido el América y eso que corrió con mucha suerte frente al Veracruz, al empatar en el minuto final en un partido que no merecía ganar, pero luchó hasta el último instante.

El Veracruz dejó dos puntos valiosísimos para tratar de salir del fondo de la tabla del descenso, pero lo intenta, pelea, se esfuerza y aprovecha las condiciones de su campo, el calor, la humedad.

El América también se esfuerza, intenta, busca mantenerse invicto y lo consigue. Jugando bien, regular o mal, ahí está, en primer lugar.

El Monterrey no termina de arrancar y Mohamed lo sabe; ahora viene la Liga de Campeones Concacaf, donde están también los Tigres, las Chivas y los Xolos, que deben tratar de ganarla.

En Europa, el Barcelona enfrenta en la Champions al Chelsea, un partido complicado para ambos equipos.

El Chelsea atraviesa una crisis, Morata anda lesionado y no hace los goles que quiere el técnico. Conte tiene la espada de Abramovich encima de él y un técnico no puede dirigir un equipo con aspiraciones cuando sabe que al finalizar la temporada se irá, dicho por el dueño del equipo.

Las noches que pasará Conte, aunque también tiene mucha culpa, como por sus arrebatos contra Diego Costa, quien ahora está haciendo goles para el Atlético de Madrid.

El Real Madrid se recupera en la Liga, pero aún está muy lejos del Barcelona y ya no lo alcanza. Mandará todo a la Champions, con la esperanza de recuperar a Marcelo y Kroos, ambos lesionados. Para ganar la Champions hay que estar al 100 por ciento.

El París Saint Germain ha montado una campaña de desprestigio contra el árbitro, que porque tiene toda la culpa y es el que los hizo caer. El PSG perdió porque tiene dos o tres jugadores de muy buena calidad y los demás son del montón.

Quite usted a Neymar, Cavani, Mbappé, ¿y alguno más? Ni Verratti o Rabiot son jugadores de gran tonelaje.

 
 
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