Ocho de cada 10 aficionados a la NFL consideran que los Patriotas conseguirán este domingo su sexto Lombardi, igualando así a los Acereros de Pittsburgh, las probabilidades y razones de que esto suceda son interminables por lo que escribir sobre ellas no es descubrir el hilo negro.
Hablarles de la efectividad de Brady y Bellichick en estas instancias, sus virtudes, récords, historia y
a veces también suerte, porque esta también cuenta y cuenta mucho, sería repetitivo y nada nuevo para mis queridos lectores, por tal razón he decidido mejor hablar de lo que traen a la mesa las Águilas de Filadelfia y ustedes concluyan si podremos presenciar este domingo a la hegemonía caer y escuchar la celebre frase "muerto el rey, viva el rey".
Se dice que las defensivas son las que ganan los campeonatos y la historia no nos deja mentir al respecto, las estadísticas no dejan duda alguna de que las Águilas tienen mejor defensiva que los de Nueva Inglaterra; sin embargo, a pesar de que se alaba a Filadelfia por su impenetrable muralla por tierra, la mayoría de los analistas consideran que al estar catalogada como la número 17 en yardas permitidas por aire desencanta y por ahí su talón de Aquiles para que Mr. Brady, que comanda la ofensiva número 2 en yardas por pase, los acabe.
Lo que no se ha dicho por ahí, es que a la segunda defensiva a la que más pases le tiraron en la temporada fue precisamente a Filadelfia con un promedio de 38.06 envíos por juego, por lo que si tomamos en cuenta que a la mejor ranqueada, Jacksonville, le lanzaron un promedio de 30.69 pases, esto es 132.66 pases menos, hay que pensárselo dos veces para decir que realmente su perímetro es mediocre y más aún cuando podemos compararlos precisamente con los Pats a los que les lanzaron un promedio de 36.83 pases por juego y en el ranking quedaron como la número 30 de la Liga en yardas permitidas.
Filadelfia también presume ser la cuarta mejor defensiva en balones recuperados con un promedio de 1.88 por partido; sin embargo, se enfrentan a la segunda mejor ofensiva en el cuidado de la bola.
Filadelfia debe controlar el reloj y dejar el menor tiempo posible a la ofensiva de Nueva Inglaterra en el campo y para ello se pintan solos pues son la ofensiva número uno de la Liga en tiempo de posesión con un promedio de casi 33 minutos por partido, en este caso, enfrentando a la defensiva número 15 en yardas permitidas por tierra y 30 por aire, me parece no será problema.
Si hablamos de las líneas ofensivas y defensivas, en ambos casos los de Pensilvania son también superiores y por ahí es donde yo encuentro el talón de Aquiles en los actuales campeones.
Hay varios QB sustitutos que han ganado el Lombardi, empezando por el propio Tom Brady; el bipolar de Nick Foles, tendrá enfrente a un equipo que da ciertas facilidades para que pueda lucir ¿Recuerdan lo que pasó hace exactamente 30 años con Doug Williams en el Super Tazón XXII?
Por todo lo dicho, sin afirmar que Filadelfia va a ganar el domingo, me atrevo a concluir que sí es posible que podamos presenciar una sorpresa, por lo pronto yo tomo los +5.5 puntos que le dan de ventaja las casas de apuesta a las Águilas.
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Nos vemos por aquí la próxima semana en mi última columna de esta temporada.
