Inició la Copa Oro, la número 14 desde que en 1991 se creó el actual formato de esta competencia regional de Concacaf que resulta muy particular, entre otras cosas, porque se realiza cada dos años y porque cuenta con más sedes que participantes (12 Selecciones en 13 estadios). La Copa Oro tan criticada por un lado y tan atractiva por otro: de la imperiosa necesidad de generar recursos para la
Confederación de Norte, Centroamérica y el Caribe, a la necesidad de sentirnos más, mucho más cerca de nuestro País, quienes vivimos en este gigantesco y maravilloso país llamado Estados Unidos.
La repetida calendarización de esta Copa impide que muchas de las máximas figuras, quienes militan en clubes europeos de prestigio, no puedan participar, aunado a casos como el de México, que debe afrontar dos torneos (Copa Confederaciones y Copa Oro) prácticamente al mismo tiempo.
Veamos algunos puntos de esta competencia, más allá de lo que todos conocemos. La edición del 2017 presenta a dos debutantes: Curazao y Guayana Francesa. El primero de ellos ocupa la posición número 68 del ranking FIFA y es la quinta Selección mejor clasificada de Concacaf (solo detrás de México, Estados Unidos, Costa Rica y Panamá). 20 de sus 23 convocados militan en el extranjero: 9 en Holanda, el resto en Inglaterra, Portugal, Japón, Eslovaquia y Dinamarca. Curazao se encuentra en el Grupo de México y es campeón de la Copa del Caribe 2017. No es el equipo débil que muchos piensan.
Guayana Francesa quedó fuera de la Copa Oro 2015 en un apretadísimo Repechaje contra Honduras, esta vez, como tercero en la Copa del Caribe, puede por fin debutar. Junto a Martinica, es una de las dos Selecciones no afiliadas a FIFA que participan en esta edición. Dentro de la convocatoria de Guayana aparece una súper estrella: Florent Malouda, con dos Copas del Mundo para Francia, dos Euros, un título de Champions League y una Premier League con Chelsea. Baal y el goleador Privat son elementos de reconocida trayectoria en Francia, juegan para Rennes y Guingamp respectivamente.
En las 13 ediciones anteriores solamente los países de Norteamérica han podido levantar el trofeo de campeón (México 7, Estados Unidos 5 y Canadá 1). Este 2017 parece una oportunidad ideal para Costa Rica, la Selección con menos bajas de las candidatas al título. Únicamente le faltan el arquero de Real Madrid, Keylor Navas, y el volante del Deportivo La Coruña, Celso Borges. Costa Rica, segundo del Hexagonal rumbo a Rusia 2018, ha encontrado en "El Machillo" Ramírez un director técnico a la medida. Definitivamente un candidato al título ante la Selección de la Liga MX que presenta el Tri, y ante las bajas importantísimas de Estados Unidos (Tim Howard, Michael Bradley, Jozy Altidore, Clint Dempsey y Christian Pulisic).
El caso de Honduras, otrora contendiente de peligro, llama también la atención: se presenta sin sus máximas figuras por distintas razones, pero lo cierto es que su tambaleante paso por las eliminatorias y el descontento de algunos elementos han hecho de este representativo uno de los más debilitados. Sin Emilio Izaguirre, sin "Choco" Lozano, Andy Najar, Mario Martínez y Roger Espinoza, los catrachos no parecen tener muchas ilusiones en esta Copa Oro.
Disfrutemos este torneo con lo que tiene y con lo que le falta, porque no solo es la competencia que nos corresponde, sino que al final de cuentas, en cada edición, no podemos negarlo, nos emocionamos con los diferentes episodios.
Twitter: @Felixatlante12
