Impulsa la Champions 'principado' de Mbappe

Homero Fernández
en CANCHA


La primera ronda de los Cuartos de las Champions confirmó varias hipótesis. El Real Madrid y Cristiano Ronaldo son parte del ADN del torneo, el Barcelona está partido en dos y necesita reinventarse, el terrorismo tiene en el futbol un blanco preferido y las jóvenes promesas (Paulo Dybala y Kylian Mbappe) ya condicionan las llaves.

El francés parece ser la novia que todos quieren tener y

sus 18 años prometen un futuro muy productivo. A los poderosos equipos no les importa que la flor se marchite en el camino, ya que Mbappe es un novato con menos de dos años en la Ligue 1.

"Tiene un extraordinario potencial, pero también mucho trabajo por delante para poder mantener el alto nivel que le exigen", ha comentado su entrenador en el Mónaco, Leonardo Jardim.

El estilo del joven delantero combina una gran velocidad, un potente remate y una brillante capacidad para dejar hombres por el camino con sus endiabladas fintas. Su doblete del miércoles ante el Borussia lo confirma.

Desde pequeño, Kylian ha estado en contacto con el deporte. Su padre ha sido entrenador de divisiones inferiores del futbol francés, y su madre, una estrella del balonmano. También tiene un hermano jugando en Emiratos Árabes. Aunque el núcleo cercano ya se mueve alrededor de su indiscutible porvenir "no hacemos reuniones familiares para decirle qué hacer y qué no hacer", ha dicho su padre Wilfried. ¿Le creemos?

Ya hay quienes comparan al 29 monegasco con Thierry Henry. Uno de ellos es Arsene Wenger, quien cobijó a "Tití" desde el mismo origen en el equipo del Principado y se lo llevó luego al Arsenal. "Tienen capacidades muy parecidas", dijo el entrenador. Además, ambos son parisinos y debutaron temprano en el Mónaco: Thierry a los 17 y Mbappe a los 16 con 11 meses. De hecho, Mbappe quitó a Thierry el récord de ser el más joven goleador en la Liga Francesa.

"Cuando comenzó a jugar a los siete años, se veía que tenía algo diferente, pero nunca pude imaginar que podría hacer una carrera", confiesa su padre a France Football.

Kylian aprendió también las artes del juego mezclándose en los partidos con los amigos de su hermano mayor. No importaba la diferencia de edad porque la compensaba con su habilidad. De niño también conserva su adicción por el futbol. Es de esos fanáticos que pueden ver hasta tres o cuatro partidos seguidos en la televisión o jugarlos en su consola de videojuegos. Es allí donde continúa encontrando inspiración de sus ídolos, uno de ellos: Cristiano.

Independientemente de adónde lo lleve su talento, su destino se lo ha señalado su hermano: "Ser un jugador que haga espectáculo, que aporte una sonrisa a la gente".

"Ser yo mismo siempre. Dar todo de mí, porque sé que trabajando recogeré mis frutos", en palabras de Kylian Mbappe, el "nuevo" Thierry Henry.

 
homero.fernandez@reforma.com
Twitter: @mundodepelota