Ejemplo de negro

Roberto Gómez Junco
en CANCHA


Ojalá cundiera, mejor encauzado, el reciente ejemplo brindado por los árbitros.

Porque más allá de lo cuestionable de sus motivos, el gremio arbitral, como tal, acaba de dar en el futbol mexicano un importante paso que para los jugadores lleva años postergado y con carácter de urgencia.

Después de la sui generis apelación, se les concedió a los de negro un año de castigo para Pablo

Aguilar y para Enrique Triverio; castigo a todas luces excesivo en ambos casos.

Pero lo ejemplar, lo plausible, ha sido esa dignidad arbitral defendida en grupo.

Ya era hora de que alguien más se uniera en este futbol mexicano en el que los únicos muy unidos, desde siempre, han sido los dirigentes, acostumbrados a defender cada uno sus propios intereses, pero también muy solidarios cuando se trata sobre todo de pisotear los derechos de los jugadores.

Como nocivo ejemplo en ese sentido, está el famoso "pacto de cuatreros", mal llamado "de caballeros", en que los dirigentes se amparan para tratar a los futbolistas y traficar con ellos como si fueran simple ganado, sin entender que afectan su propio negocio; porque esos jugadores que se dejan pisotear fuera de la cancha, tarde o temprano serán pisoteados adentro.

Jugadores, claro está, indefensos por sumisos, por agachados y poco solidarios.

Por eso es alentador este otro magnífico "ejemplo de negro", porque demuestra que sí hay forma de organizarse como grupo con un poquito de inteligencia y los necesarios pantalones.

Así, los árbitros mexicanos hicieron valer la defensa de su dignidad y la solidaria conciencia de gremio.

Y los futbolistas... a ver cuándo.

 
Twitter: @rgomezjunco