El América jugará mañana un partido con el que ha soñado en todo el año.
En la Semifinal del Mundial de Clubes 2016, que se juega en canchas japonesas, la escuadra americanista enfrentará a uno de los equipos más poderosos e importantes en el mundo: el Real Madrid.
Una escuadra merengue de incomparable prestigio, que se instaló directa y automáticamente en esta penúltima instancia
del pequeño torneo al ganar el año pasado la Final de la Champions League; por mucho, el torneo de clubes de más elevado nivel futbolístico en el planeta.
Muy de vez en cuando se presenta la oportunidad de medir, con mayor grado de confiabilidad, qué tantos escalones separan a nuestro balompié mexicano del mejor futbol del mundo.
Como el Real Madrid suele jugar al nivel de los que mejor juegan, y como el América es en estos momentos uno de los mejores exponentes del futbol mexicano, este duelo se presenta como un magnífico parámetro que mida la realidad, el verdadero estatus de la Liga MX en el ámbito internacional.
Ni tan mala como muchos piensan, ni tan buena como muchos creen; una Liga entre las más fuertes del continente americano, pero evidentemente abajo de las cuatro más grandes de Europa.
Ciertamente, el Real Madrid está muy por encima del nivel promedio español, a diferencia de lo cercano que está el América al promedio mexicano; pero para vislumbrar qué tan lejos se está de la cumbre, nada mejor que enfrentar a quien ahí se desenvuelve.
Mañana, el América tratará de comportarse lo mejor posible en un partido de ésos que cualquier futbolista quisiera jugar, en un esperado encuentro que le llegó en el año de sus 100 a manera de inmejorable festejo.
Veremos cómo se comporta y qué tanto lo aprovecha.
gomezjunco@mural.com
Twitter: @rgomezjunco