Después del Clásico Nacional de Copa, el Regiomontano de Liga.
El pasado miércoles, en la cancha del Estadio Azteca, las Chivas obtuvieron por la vía de los penales un boleto a la Final copera que merecían llevarse desde los 90 minutos.
Con esa victoria, el Guadalajara no sólo se instaló en esa Final que el próximo miércoles jugará ante el Querétaro en La Corregidora, sino que
además fortaleció sus aspiraciones de pelear también por los más altos objetivos en el actual torneo de la Liga MX.
Si cualquier triunfo vale por sí mismo, obtenerlo a costillas del acérrimo adversario le da mucho más valor.
Y si de acérrimos adversarios se trata, ningunos tan acendrados como aquellos que surgen de los auténticos y principales Clásicos, como en nuestro futbol mexicano lo son el Nacional entre el América y las Chivas o el regiomontano entre los Rayados y los Tigres.
Esta noche, en el Estadio Universitario, se escribirá una edición más de ese Clásico Regio, cuyo ingrediente extra en este caso es la posible eliminación del Monterrey si no es capaz de salir airoso.
Incluso con un empate, las probabilidades rayadas de clasificación serán escasas.
En cambio, los Tigres están prácticamente instalados en la Liguilla; y por el futbol que suelen desplegar, quizá junto con el Pachuca y las Chivas, deban ser señalados entre los principales aspirantes al título.
Una pequeña lista en la que también aspiran a apuntarse los Xolos, el León, el América... y el Monterrey si clasificara.
Como no es lo mismo apuntarse o borrarse gracias a o por culpa del máximo adversario, el regio duelo de hoy adquiere mayor importancia, como la tuvo el del pasado miércoles.
Por eso los Tigres y los Rayados estarán obligados a ofrecer esta noche sus mejores actuaciones.
Y porque de Clásicos a Clásicos, entre los auténticos, en nuestro balompié siguen siendo DOS los principales.
Twitter: @rgomezjunco
