Para que los aficionados que van a visitarlos a El Barrial no se asoleen, la directiva colocó un toldo en el estacionamiento para que puedan esperar, con orden, a los jugadores.

Esta atención que tuvieron con sus hinchas ha funcionado muy bien las últimas semanas, pues se ha visto "los lunes de selfies", que el público que en completo orden y obtiene a cambio una fotografía con los jugadores.

La mecánica consiste en esperar a que termine el entrenamiento y tiempo después el guardia de seguridad da acceso al interior, unos diez metros dentro de las instalaciones, en el paso de los jugadores hacia la calle.

Al salir los jugadores, quien tenga tiempo y así lo desee, se estaciona y baja del automóvil para dirigirse hacia los aficionados que esperan formados bajo el toldo.

El primero en atenderlos ayer fue Walter Ayoví, quien al descender de su auto recibió aplausos de la afición.

"Buenos días", les dijo y recibió la misma respuesta de ellos.

Alfonso González, Hiram Mier, José María Basanta, Edwin Cardona, Carlos Sánchez, Celso Ortiz e Ivan Piris, fueron algunos de los jugadores que descendieron de sus autos.

"Qué buena onda", se escuchó decir a un aficionado que iba con un menor, a quien la instalación del toldo le benefició para no asolear a su pequeño.

El equipo entrenó por espacio de una hora de cara al encuentro que sostendrá el sábado ante el Toluca en el Estadio BBVA, el segundo de las cinco finales que tienen en el cierre del torneo y de la que se han comprometido en ganar cuatro de cinco, para poder clasificar.

El primer escollo fue Chiapas, a los que se ganó con autoridad 4-1 el sábado en Tuxtla Gutiérrez.