El volante argentino de los Tigres, Guido Pizarro, espera que le sea retirado el castigo de un partido de suspensión, luego de ser expulsado el domingo en el juego de Campeones de Campeones ante el Pachuca.

A su llegada con el plantel a la Ciudad, procedente de Los Ángeles, externó su sentir respecto a la tarjeta roja que recibió.

"Creo que ayer (domingo) se equivoca el árbitro, pero bueno eso dependerá de lo que haga Tigres y lo que la Federación quiera decidir", expresó el naturalizado mexicano.

"Yo traté de entregarme y bueno me tiré al piso un poco fuerte, pero ojalá que me la saquen".

El equipo felino regresará este martes a sus entrenamientos en Zuazua con miras al torneo que abren el domingo visitando a Santos.