Han pasado 20 años, pero Sergio Ariel Verdirame no se olvida de aquella tarde en el Estadio Universitario.

Aquel 24 de marzo de 1996, el "Pibe" marcó uno de los dos goles con los que los Rayados derrotaron a los Tigres en el llamado "Clásico del Descenso".

Sin embargo, para el argentino, el triunfo en la edición 51 no es especial porque ese día los Tigres quedaron condenados a descender a la Primera A, sino porque fue el último de los nueve Clásicos que disputó con los Rayados y se despidió invicto.

"Lo recuerdo como un Clásico más ganado, pero sé lo que significa para la gente de Rayados que después de 20 años me lo sigue recordando", expresó Verdirame en entrevista con CANCHA.

"Significó mucho porque fue mi último Clásico y pude mantener el invicto".

En la década de los 90, los Rayados ligaron 13 Clásicos sin perder, lo que permanece como una marca histórica para el club, y Verdirame estuvo en nueve de ellos con un balance de siete triunfos y dos empates.

Le marcó cuatro goles a los Tigres y el último de ellos es quizá el más recordado por los aficionados albiazules, porque fue el que el que le dio el empate al Monterrey al minuto 22 del Clásico 51.

¿Qué sentiste en ese momento?

"Sentí mucha alegría. El gol fue un pase de Raúl Aredes que entró por la derecha, centro muy preciso y la tomo de volea. Me volví loco al ver que la pelota entraba", dijo sincero el argentino.

Sin embargo, después de tantos años, todavía se puede notar que el "Pibe" tiene sentimientos encontrados por lo vivido ese día.

Después del gol que hizo con su educada zurda, Luis Miguel Salvador marcó el 2-1 sólo tres minutos después y Tigres no se levantó.

"Te soy sincero: me dio alegría por el triunfo y tristeza de ver amigos del futbol pasar por un momento tan difícil", recuerda.

"Tuve sentimientos encontrados. Ver a los jugadores de Tigres abatidos, después del gol de Luis Miguel los note sin fuerzas ya".

Nada volvió a ser igual, el Clásico tomó una relevancia mayor desde ese día.

¿Cómo crees que haya influido en cómo se vive la rivalidad en la Ciudad?

"Mucho, porque a Tigres el descenso los hizo más fuerte y a los Rayados les dio para disfrutar ese momento para toda la vida", aseguró.