El Monterrey saldrá de la comodidad del Estadio BBVA Bancomer, donde sigue invicto, para demostrar como visitante que puede ser un equipo de respeto en el Clausura 2016.
 
Los Rayados siguen sin perder un partido en su nueva casa y no caen como local desde diciembre del 2014, cuando todavía jugaban en el Tec, pero fuera de casa es cuando sufren y más en una plaza como la del Puebla, donde hoy juegan en el Estadio Cuauhtémoc.

En 70 años, desde que se enfrentaron por primera vez en la temporada 45-46, los Rayados sólo han obtenido cuatro victorias en la Angelópolis, que se ha convertido en una aduana casi imposible de pasar para los albiazules.

Sin embargo, el equipo dirigido por Antonio Mohamed quiere romper paradigmas y ligar su segunda victoria en el torneo para confirmar que no fue una ilusión el triunfo que obtuvieron en la jornada inaugural contra los subcampeones Pumas.

A pesar de la ausencia del portero Jonathan Orozco y de los defensas Hiram Mier y Édgar Castillo, todos descartados por lesión, los albiazules mantendrán la columna vertebral del equipo que venció a los universitarios, aunado al regreso del uruguayo Walter Gargano, quien jugará por primera vez en la media con su compatriota Carlos Sánchez.
 
Si algo se puede esperar del Monterrey es que sea un equipo compacto, que priorice el cero en contra y que apueste a la contundencia para ganar partidos.

En ese sentido, el Puebla será una buena prueba. El equipo de La Franja entró a la Liguilla el torneo pasado y salió vivo del Azteca en la primera fecha, cuando enfrentó al América y sacó un empate sin goles.

Si bien sigue peleando por su permanencia en Primera División, el equipo dirigido por Pablo Marini se ha distinguido por ser uno de los mejores equipos jugando como local, con 21 puntos de 27 disputados.

En cambio, el Monterrey no sólo fue uno de los peores visitantes del torneo pasado con sólo dos triunfos en nueve partidos. Una tendencia que intentarán revertir a partir de esta tarde para soñar con volver a jugar una Liguilla.

VUELVE A PUEBLA SIN BUEN RECUERDO
Carlos Sánchez vuelve a Puebla, ahora enfundado en los colores del Monterrey.

El uruguayo tuvo su primera experiencia en el futbol mexicano jugando en el equipo de La Franja, aunque no son recuerdos muy gratos los que guarda el ex jugador del River Plate.

El mediocampista charrúa jugó sólo 25 partidos entre el Apertura 2013 y el Clausura 2014, en los que marcó seis goles, pero al cabo de un año regresó a Argentina.

Sánchez volverá a pisar el Cuauhtémoc, donde jugó por última vez el 27 de abril del Clausura 2014. Ese día marcó su último gol como poblano, uno de los tres que anotó jugando en casa.

Después de dos años, Sánchez está de vuelta en el futbol mexicano y aunque no lo considera una revancha, ahora sí está donde quiere.

"Puebla no fue un equipo que elegí, fue algo que se dio en ese momento, ahora sí elegí al Monterrey", dijo el día de su presentación oficial con los Rayados.